Cathédrale Saint-Vladimir-le-Grand de París, 11 febrero 2022.
La BBC y la prensa ucraniana lo cuentan así:
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“For the first time since 1917, Ukraine is celebrating Christmas on 25 December.
The move is more than just a change of date from 7 January – the date for Christmas in the Julian calendar, which Russia uses.
It’s the continuation of a significant cultural shift in the country – the latest attempt to eradicate Moscow’s influence in Ukraine.
The adoption of the Western, Gregorian calendar is also a sign of Kyiv’s continuing bid to align itself with Europe…” BBC, 23 diciembre 2023. James Waterhouse, Ukraine war: New Christmas date marks shift away from Russia.
The Kyviv independent, 24 diciembre 2023, ‘The time is right for change’: More Ukrainians celebrating Christmas on Dec. 25 this year.
Dicho de otro modo…
El gobierno ucraniano decidió el mes de julio pasado desplazar del 7 de enero al 25 de enero la celebración de la Navidad, el nacimiento de Jesucristo… ruptura política y religiosa, histórica y simbólica con Moscú y con la iglesia ortodoxa fiel a la Rusia de Putin.
Ucrania desea insistir en su historia europea, restaurando el calendario religioso occidental.
Detalle religioso, espiritual, simbólico, cuando los EE. UU. y Europa parecen “dudar” de su compromiso histórico y militar con la soberanía de Ucrania, víctima del imperialismo ruso, hoy como ayer.
José says
El siglo XXI será religioso o no será. Malraux quizá tenia razón. Los dioses fueron arrasados y llevados y encerrados en los museos occidentales. Encerrados y por las noches en la oscuridad hablaban entre ellos de hacer frente al dios que estaban creando los dueños de los museos. Un dios diablo capaz de arrasar el Everest si se convertía en obstáculo . Un mundo arrasado físicamente y espiritualmente. Un mundo donde el no pensamiento y la no espiritualidad era la consecuencia del encuentro del leviatán y bahemoth demonios de los mares y de las tierras servidores del nuevo dios virtual de los cielos creado por los homínidos occidentales.
JP Quiñonero says
José.
Pues a ver que pasa…
La religión del Papa Francisco y la religión de los ayatolás iraníes quizá sean un poco o un mucho antagónicas…
Para colmo, muchos cristianos llaman «comunista» al Papa, por atreverse a pedir un poco de piedad y humanidad para los inmigrantes…
Ayayayay …
Q.-