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Un sendero que pudo recorrer Cézanne, camino de la Montagne Sainte-Victoire, 15 /16 abril 2006. Foto JPQ.
Tras ciento tres años de peripecias y especulación inmobiliaria, Francia descubre el Mediterráneo olvidado de Paul Cézanne (1839 – 1906) en la casa de campo de la familia del genio, en Jas de Bouffan, en las afueras de Aix-en-Provence (capital de Provenza / Occitania), que la alcaldía y el Estado tardaron muchas décadas en convertir en monumento nacional.
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Louis Auguste Cézanne, el padre del pintor, banquero, compró la casa de campo de Jas en Bouffan en 1859, por 65.000 francos de la época. Una ganga, con la que cobrarse los impagados de un cliente desafortunado. Al margen de sus viajes y estancias, en Aix, su ciudad natal, y París, la capital, Cézanne vivió y pintó en la casa de campo familiar entre 1859 (cuando tenía veinte años) y 1899 (siete años antes de su muerte). Buena parte del capítulo cezanniano de la gran revolución impresionista se pinto en esa casa y sus alrededores.
Durante los paseos campestres que comenzaban en la casa comprada por su padre, Cézanne pintó sus visiones de la Sainte-Victoire, la legendaria montaña de la región, que también sedujo a Pablo Picasso, que llegó a comprarse una residencia excepcional, donde está enterrado, en las inmediaciones de esa montaña. «Me he comprado la Sainte-Victoire», le dijo Picasso a Daniel-Henry Kahnweiler, uno de sus marchantes, que le preguntó «¿Cuál de ellas?», creyendo que se trataba de una de las grandes obras de Cézanne. «La auténtica», respondió el genio malagueño, confirmando que se trataba de una inmensa casona, bastante próxima a la residencia familiar de Cézanne.
A la muerte de su madre, Cézanne y sus hermanas vendieron la casa de campo de Jas de Bouffan a un ingeniero agrónomo de Carcassone, Louis Granel. Siguió medio siglo de compras y ventas de la casa de Cézanne. En 1994, al fin, noventa años después de la muerte del genio, la alcaldía de Aix terminó comprando la casa a su último propietario privado, André Corsy. Ocho años después, al fin, el Estado clasificó como Monumento la casa y taller de Cézanne.
Casi todo se sabía sobre el legado cezanniano, su puesto capital en la historia del impresionismo, la dispersión de su obra por los grandes museos de varios continentes. Comenzaba la «explotación» de Cézanne en su ciudad natal, que no tenía, hasta entonces, grandes obras del patriarca impresionista.
De entrada, se recordó que, en verdad, Cézanne no solo pintó muchas obras maestras en su casa: también la «decoró» y pintó una docena larga de grandes composiciones murales, en el gran salón oval de la entrada de su casa. Todo se fue dispersando desapareciendo, desmontado y comprado por grandes museos, desde 1912.
A partir del 2000, al fin, la alcaldía de Aix inició un proceso de rehabilitación y «explotación», convirtiendo la casa de campo y sus dependencias en Museo Cézanne. La celebridad del genio convirtió ese museo en destino turístico privilegiado. Y la alcaldía de la ciudad consideró oportuno renovar y ampliar dependencias…
Esos trabajos culminaron, hace meses, con un descubrimiento excepcional: en el gran salón de la casa se descubrieron «elementos» de una obra, unas obras, que los especialistas consideran como el «principio» de la creación pictórica de Cézanne, un gran fresco de unos seis metros cuadrados, representando la entrada a un puerto, con barcos y un cielo brumoso. Ahí es nada. El descubrimiento de una de las matrices de uno de los grandes patriarcas de la pintura contemporánea. Origen «último» desconocido y nunca «catalogado», pero bien certificado por los especialistas, desde hace meses, realizado cuando Cézanne apenas tenía 20.
El 2006 se celebró el Año Cézanne, con motivo del centenario de la muerte del pintor. La alcaldía de Aix se propone aprovechar cultural y comercialmente el descubrimiento, volviendo a declarar 2025 como nuevo Año Cézanne. Comienzan a programarse un rosario de actos, locales y nacionales. Continuará. ABC, Francia descubre un mural desconocido de Cézanne en su casa de campo familiar.
La Sainte-Victoire, Vauvenargues, Cézanne, Picasso y otros misterios gloriosos.
Arte.
De la casa donde se vivía toda una vida donde habían vivido incluso los que lo precedieron a vivir en pisos apartamentos y algunos en alguna casa pero cambiando y moviéndose incluso en habitaciones de hotel. El pueblo donde los pudientes aún hoy en día pero menos se conocían por la casa en que vivían. Ya a principios del siglo pasado todo empezó a cambiar. Los barrios estratificados según el poder adquisitivo separaban las clases sociales. Cezanne murió y aparecieron las vanguardias la bohemia y todo cambió de manera acelerada fue el siglo donde el pasado se fue borrando y se convirtió en un arte donde todo se quedó inacabado como predijo el siglo que vivió Cezanne en sus cuadros inacabados incluso sus murales de la casa en la que pasó toda una vida. Quería percibir el mundo en el que vivía quitando lo que sobraba y se quedó en lo que uno lleva dentro desde que nace en esos cuadros donde lo que sobresale son los esquemas geométricos de su realidad. El último en trasmitir un mundo que se iba y no volvería. Hoy lo que queda de su arte se ha convertido en puro espectáculo de masas puro negocio reproducido hasta el infinito. Como venía a decir Giacometi después de Cezanne el arte no ha hecho más que llorar esperando el nuevo arte de las maquinas inteligentes o tontas para espectadores sin biografía.
José,
Bueno … arte, arte, claro que lo hay.
En este caso, Cézanne quizá no estimaba mucho la obra que ahora se descubre… allí la abandonó y vendió la casa…
Vaya usted a saber…
Q.-
¡Ay, Josep!
¡Cómo cambian las cosas!
Es todo tan efímero en nuestros días…
En fin, conocimos aquellas casas solidas y estables de toda la vida, habitadas por la misma familia durante varias generaciones…
Adaptarse o morir. Son otros tiempos…
Quiño,
Creo que te lo he dicho varias veces pero no me importa repetirlo:
Me encantan tus historias!!!
Puedo imaginar a Cezánne recorriendo estos senderos…
Gracias!!!
Ah, Fina, tu amistosa generosidad me da un chute de alegría grande, vaya que sí.
Graciasssss
Q.-