Place de l’Hôtel-de-Ville – Esplanade de la Libération, antigua Place de Grève, 17 febrero 2024. Foto JPQ.
Pretendiente protestante al trono de Francia, Enrique de Navarra llegó a afirmar que «París bien vale una misa», antes de convertirse al catolicismo, en 1593, para ser coronado como Enrique IV…
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… Cuatro siglos más tarde, los aspirantes a seguir en la capital los Juegos Olímpicos del verano que viene deberán asumir que «París vale un pastón».
París espera 15 millones de espectadores que pudieran consumir muchos millones de comidas, aperitivos, bocatas, etcétera. Las 125.000 habitaciones de los 2.100 hoteles de la capital y su región se han beneficiado de una demanda excepcional. A seis meses cortos de los JO, entre el 26 de julio y el 11 de agosto próximos, el precio de los hoteles, la comida, los restaurante, los bocatas, las cervezas, los aperitivos, el café, los transportes públicos, el viagra, los preservativos, los geles y lubricantes «íntimos», han comenzado a subir de manera vertiginosa.
A finales del año pasado, los hoteles parisinos oscilaban, de media, entre los 75 y los 1.000 euros la noche con una cama doble. Para llegar a alcanzaron una media de 759 euros, y recaer, este mes de febrero, a una media de 522 euros.
Esa media oculta disparidades excepcionales, según la calidad y la situación de los hoteles.
Según varios estudios de mercado concordantes, un hotel próximo a la Torre Eiffel, que costaba el año pasado entre 150 y 200 euros, cuesta hoy entre los 1.000 y los 1.100, una subida del 500 / 550 % por ciento. Un hotel modesto, en un barrio modesto, en el distrito XIII, podía costar el año pasado entre 100 y 120 euros la noche. Hoy puede costar más de 600 euros. Una subida superior al 500 %.
En la periferia de la capital, y en algunas capitales de provincias, más o menos próximas, como Lille o Châteauroux, las subidas del precio, constatadas por varias agencias pueden oscilar entre un 300 y un 750 %.
Ante esa subida excepcional, a finales del año pasado, con un discreto descenso, estabilizado, por ahora, el modelo de alquiler individual de Airbn quizá sea el gran beneficiado, con más de 30.000 anuncios a finales del año pasado. Una cifra tres veces superior a la del 2022.
Durante los JO, el precio de la noche de habitación en los veinte distritos de París oscila hoy, en Airbn, entre los 620 euros (en el distrito XX, el más pobre y multicultural) y los 2.400 (en el distrito VIII, barrio «bien» por excelencia). En algunos barrios particulares, como Saint-Germain-des-Prés, el precio de la noche incluso puede ser superior.
El Estado, la alcaldía de París y el gobierno de la región Isla de Francia (la capital y su periferia), han repetido hasta la saciedad que «ellos» están dispuestos a «combatir la inflación». Pero también contribuyen a su manera, discreta pero real, a la subida generalizada de los precios.
El Museo del Louvre, uno de los más visitados del mundo, ha subido el precio de sus entradas de 15 a 22 euros. Una subida del 49 %. Entre el 2000 y el 2023, las entradas al museo nacional subieron un 142 %. El Palacio de Versailles, el Museo Picasso, han tomado medidas muy semejantes.
Cuando se puede y se está dispuestos a pagar 500 euros por una noche / habitación de hotel, la subida de 2 a 4 euros del billete del metro parisino quizá no sea una tragedia. Pero tendrá su importancia, modesta pero sensible, en el bolsillo de los parisinos menos favorecidos, que deberán afrontar otro rosario de subidas.
Un café, en la barra, en un barrio medio o modesto, suele costar en París entre 1 y 2 euros. En los Campos Elíseos y Saint-Germain-des-Prés, el precio del mismo o parecido café, sentado, en la terraza, puede alcanzar los 10 / 15 euros. El precio medio de una caña de cerveza, en los bares parisinos, oscila entre los 5 y los 7,5 euros. Desde hace semanas, esa media ha comenzado a subir un 25 % en algunos barrios turísticos.
Los JO también influirán en el precio de la comida, rápida o en el restaurante. Un menú modesto en un barrio parisino modesto no bajará de los 15 euros. Y puede subir a los 50 en restaurantes más o menos afamados. La afluencia masiva de turistas de temporada contribuirá a nuevas subidas de precios.
A su manera, muy selectiva, los JO convertirán París en «ciudad del amor». En su día, el Comité de Organización de los Juegos lanzó un procedimiento de licitación para comprar varias decenas de miles de preservativos, que se distribuirán gratuitamente o pondrán a disposición de los atletas. En las inmediaciones de varios sitios privilegiados, donde se celebrarán pruebas de atletismo, han comenzado a proliferar negocios de venta de viagra, preservativos, geles y lubricantes «íntimos». El precio de las cajitas de diez o doce preservativos, suele ofrecerse, a la salida de algunas estaciones de metro, entre los 8 y 12 euros, pero ha comenzado a subir de 15 a 20 euros en los alrededores de algunos sitios particulares, próximos a futuras competiciones deportivas. ABC, París hace el agosto: las ‘tarifas sablazo’ de hoteles, restaurantes y museos.
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