Rue de la Cité, 27 mayo 2024. Foto JPQ.
Ante las elecciones europeas del dominogo día 9, la España política y la España de las ¿ideas? el ¿pensamiento? destacan por la mediocridad cainita del duelo a garrotazos y el penoso vacío intelectual, propio de una (in) cultura sonámbula.
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Peter Sloterdijk, uno de los grandes pensadores europeos de nuestro tiempo analiza la coyuntura europea de este modo:
«… Les Européens possèdent un très grand privilège : ils ont le privilège du spectateur. En observant les centres d’action de l’histoire mondiale à laquelle on ne participe que de façon réticente, on voit bien que le rôle du premier acteur n’est pas enviable. Personne ne peut vraiment envier aux Chinois le destin que leur chef leur propose : il mène leur pays dans une confrontation mondiale qui pourrait aboutir à une guerre fatale. La même chose est vraie pour les Américains, qu’il ne faut pas non plus envier pour leur rôle sur la scène de l’histoire mondiale tardive. Tous sont coincés dans des schémas qui, du point de vue européen, sont dépassés. Et ils sont condamnés à se faire mal. Les grands acteurs portent encore les masques de la grandeur, de la grandiloquence et de la volonté de pouvoir tandis que les Européens possèdent un privilège très précieux, celui de ne pas vraiment être forcés d’intervenir dans cette fausse comédie enracinée dans un mimétisme désuet. On pourrait aussi dire que les Européens ont l’avantage d’avoir eu un penseur comme René Girard, qui a démasqué le schéma de la grande politique en tant que mimétisme néfaste. Une des raisons pour lesquelles il faut admirer Emmanuel Macron, c’est parce qu’il a su garder un certain sens de ce grand jeu ; il y participe à sa façon, sans vraiment être capable de faire beaucoup de mal. Mais il est le seul à rappeler aux Européens que leur salut n’est pas vraiment dans leur vie privée. Et il aurait raison de se plaindre auprès du chancelier allemand qui, après le deuxième grand discours de la Sorbonne, fin avril, n’a pas encore livré de réponse allemande satisfaisante…». Le Figaro, 3 junio 2024. Peter Sloterdijk: «Les Européens ont un très grand privilège, celui d’être les spectateurs de l’histoire».
Las negritas son mías.
Raymond Aron, profeta de Europa.
La nueva batalla de los euromisiles entre Putin y Macron.
La España de Sánchez, más pequeña y frágil en una Europa amenazada.
Ricardo Lanza says
Y olvido a pensadores y a políticos, desatiendo las cosas de la Europa, no soy espectador ni pretende actuar pronunciando reniegos y exabruptos. Es la fotografía lo que esta vez me llama, la que veo ahora mismo, la que devela unas imágenes de aguas ya sombrías, ignorante si son de día negro o de crepúsculo, casi se me hacen de un pasado en el que yo estuviera muerto, refugio silencioso que me acoge y me lo gano, fuera su llave la magia practicada, suerte de santa fe en mi propio credo, dota a mi cuerpo de un dulce declinar, quedan las prestaciones impecables, han concentrado mis ensueños en París, en este caso es la ciudad a ti debida, el don que el estimado me ha traído y yo me apropio, se haga eviterno.
JP Quiñonero says
Ricardo,
Graciasssssss … tus palabras me iluminan, nos iluminan, con una luz purísima, sí.
Graciassss
Q.-
Fina says
Don Ricardo Lanza,
Deseo que Ud. y sus dones sean eviternos…
Jose says
Herodoto fue un historiador que dejaba hablar a los no griegos. Veía la historia como la gran autopsia en la que el muerto era el que hablaba y no mentía. Era un historiador sabio. Sus sucesores griegos y romanos aún aprendían de la historia. Todo se acabó cuando la historia estaba en manos de unos fantasmas peremnes y no había ni pasado ni futuro. Los europeos asiáticos se impusieron con su historia y no dejaron hablar a los otros pueblos ni a los muertos con su progreso crearon los instrumentos para acabar con la historia con la ayuda de sus libros sagrados. Al final han conseguido que no haya ni espectadores ni actores nadie conoce ni puede preveer lo que puede ocurrir y cuando miran al cielo y no saben si es un avión un dron un misil o los rayos divinos que bendicen al pueblo elegido. No es la democracia universal la que acaba con la historia sino por saber quién tiene el misil más potente. Ni tragedia ni comedia teatro del absurdo euroasiático. Cuando uno se cree el ombligo del mundo no ve nada más y el cosmos se convierte en caos la flecha del tiempo nadie ni nada puede pararla y cuando un circulo se cierra otro se abre en el universo. Imposible pensar en la ciudad de los cerdos. La molicie ha acabado con la anamnesis con el recuerdo del mundo de las ideas.
JP Quiñonero says
José.
«Virgencita, virgencita…» A ver como acaban los ríos de sangre derramada en Ucrania…
Q.-
Fina says
Ay, Josep!
Aquí me tienes recreando a las Musas…Ahora estoy pintando a Talía y a Melpómene, es un tema que me apasiona.
Esperemos que Clío siga escribiendo e inspirando a los historiadores y que Mnemósine, la madre de las Musas, nos conserve la memoria y los recuerdos…
Bona nit. Buenas noches a todos/as.
Fina says
Una exposición de pinturas ha variado mis costumbres, pero ya vuelve la normalidad a mi vida y espero poder ponerme pronto al corriente de lo que ocurre en este querido INFIERNO.
Quiño, tu foto es divina!!! Creía que era una pintura impresionista…
Gracias a todos por vuestras aportaciones!!!
JP Quiñonero says
Fina,
Lo importante es lo importante: vengaaa
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Siempre tan amistosa y generosa… graciass por tus palabrasssss
Q.-