Place de la Bastille,15 junio 2024. Foto JPQ. Manifestación del Nuevo Frente Popular.
«From the river to de sea Palestine will be free» (Desde el río hasta el mar Palestina será libre), convertido en slogan de Hamás, ha dividido y enfrenta a personalidades de distintas familias de izquierdas.
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La coalición Nuevo Frente Popular (NFP), integrada por La Francia Insumisa (LFI, extrema izquierda populista), el PS, el PCF, los Verdes y varios grupúsculos, se ha dividido y está en crisis antes de llegar a ser una realidad gubernamental.
En Francia, el modelo electoral, uninominal, a dos vueltas, lamina a los partidos pequeños, que no siempre llegan a tener representación: y favorece a los grandes, las coaliciones. Extrema izquierda, socialistas, comunistas y ecologistas se han repartido circunscripciones donde unos y otros pueden ganar… con lo cual: separados, perderían; unidos electoralmente serán una gran fuerza «arco iris», con muchos diputados pero pocas posibilidades gubernamentales.
«Uninominal»: «Diputado elegido en un departamento o circunscripción gracias al voto ciudadano, sin pertenecer forzosamente a un partido político». La división y enfrentamientos entre LFI, el PS, el PCF, los Verdes complica y quizá hace imposible un gobierno unido. Pero les permite ganar muchos escaños.
En la periferia multicultural de París y las grandes ciudades, LFI se dirige con éxito a un electorado de franceses negros y musulmanes. Incluso publica panfletos en árabe. Esa táctica sería catastrófica en el departamento de la Corrèze, donde el ex presidente François Hollande espera reconquistar a un electorado reformista tradicional, con un proyecto socialdemócrata europeísta, muy alejado de Hamás.
Los jóvenes de extrema izquierda han utilizado como un insulto el calificativo de «sionista» contra Raphaël Glucksmann, que lideró la lista socialista en las recientes elecciones europeas y es una estrella del socialismo europeísta. Glucksmann ha denunciado los ramalazos antisemitas de LFI, formando parte del mismo NFP. Glucksmann es partidario de una Europa fuerte y unida, en los antípodas del programa euroescéptico de LFI.
Líder de LFI, Jean-Luc Mélenchon aspiraba a ser candidato a la candidatura de la presidencia del Gobierno si el NFP ganaba las elecciones. El PS, los Verdes y varios miembros de su propio partido han rechazado esa proposición.
LFI es el partido líder y mayoritario dentro del NFP, pero ese liderazgo ha comenzado a agrietarse en su misma dirección. Mélenchon es contestado de manera muy agria. François Ruffin, líder emergente, ha constatado un enfrentamiento total.
En el seno del PS, cohabitan sin entenderse varias familias políticamente antagónicas. Lionel Jospin, ex primer ministro, es partidario del NFP «para combatir a la extrema derecha». Por el contrario, Manuel Valls y Bernard Cazeneuve, están totalmente en contra de la unión electoral con LFI y estiman que Hamás es una organización terrorista.
En el seno de los Verdes cohabitan dos familias enfrentadas. Una tendencia que ha coqueteado con la violencia y el «ecoterrorismo» y una tendencia de izquierda no violenta.
El PCF, antiguo líder de las izquierdas, se ha convertido en un partido muy minoritario, con una supervivencia muy modesta.
Paradójicamente, esa división, en el fondo y la forma, entre los miembros del NFP, puede tener muy buenos resultados electorales que tendrían muy difícil si no imposible traducción gubernamental. ABC, El nuevo Frente Popular francés está dividido y en crisis antes de llegar a ser realidad + La inmigración y la edad de jubilación marcan el debate de los candidatos en Francia.
Le Pen y el Nuevo Frente Popular tienen programas económicos muy parecidos.
La extremas derechas y las extremas izquierdas no tienen sentido en los países occidentales hiper industrializados. No necesitan gobiernos fascistas ni comunistas para crear infraestructuras industriales tal vez para destruirlas. Las dictaduras en la época actual no tienen sentido si no es en países que quieren acabar empezar la industrialización. No a si el pertenecer algún grupo del tipo que sea para que el individuo desposeído de todo pueda tener alguna posibilidad de sentir que forma parte de algo con otros iguales. Da igual los diferentes grupos que forman las sociedades complejas es pura necesidad identitaria desde grupos políticos religiosos económicos étnicos religiosos…y los que no a obedecer y distraerse con las pantallas. El que detenta el poder no es un tirano con el que se pueda organizar un tiranicidio es algo nuevo nunca visto. El nuevo Uno no se acaba de visualizar pero está ahí y es el nuevo poder ajeno a políticas religiones etnias…solo está preocupado en acabar la red que se expande por todas partes para poder dirigirlo todo con el programa de los programas. Estamos en ello. Nadie podrá cambiar el núcleo de este nuevo poder a no ser que todo lo humano quede arrasado. Francia puede encabezar una nueva revolución contrarrevolucionaria. Dejar constancia que todo ha cambiado y que la nueva guillotina son satélites y todo tipo de juguetes que lo que menos valoran son los individuos y aún menos sus fantasmas culturales étnicos religiosos…lo que más valora el nuevo poder son aquellos que se esfuerzan en alimentar y aumentar el nuevo poder de la red planetaria. Francia en crisis y todo el occidente industrializado y una gran parte del planeta por industrializar y casi industrializados. La obra abduce al creador.
José.
En Francia, entre el 30 y el 33 % de los franceses se disponen a votar a la extrema derecha… apenas un 5 / 6 % al PCF …
Del 50 al 60 % de los obreros se disponen a votar extrema derecha…
Q.-
Josep,
Empecé a leer El Libro de las Mutaciones (o de los Cambios). Espero que la sabiduría china me ayude a lograr adaptarme a los grandes cambios y metamorfosis que se van presentando en nuestra época.
Veremos…Fue un regalo de mi querida y admirada amiga Isabel que tengo pendiente de leer, quizás no había llegado el momento oportuno hasta hoy…¡Tanto que aprender, todavía!
Bona nit! Buenas noches a todos/as.