Rue de Rennes, 28 junio 2024. Foto JPQ.
«Qué ingenuo eres, Quiño», me dice F. cuando le comento incidencias personales relacionadas con los líos en curso.
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Pongo cara de indiferencia.
El comportamiento de los franceses ante los saldos quizá sea otra cosa. Pero también habla de intimidades de la más cruda realidad:
«Alors que l’été débute à peine, les soldes suscitent déjà des inquiétudes parmi les commerçants. La Fédération nationale de l’habillement (FNH) tire la sonnette d’alarme. Seulement 4 Français sur 10 comptent faire les soldes d’été 2024, avec un budget moyen en baisse…». L’Officiel de la Franchise.
«Les soldes en perte de vitesse pour plus d’un Français sur deux.Tandis que l’inflation semble se stabiliser ces derniers mois, plus de la moitié des Français confie ne pas avoir l’intention de faire les soldes cette année. Un sur cinq ne trouve pas d’intérêt à faire les soldes (20 %), ils sont dans les mêmes proportions à considérer qu’il y a déjà suffisamment de promotions intéressantes tout au long de l’année (20 %). Enfin, 19 % estiment qu’ils ne peuvent pas en profiter en raison d’un manque de moyens financiers.
Les foyers ayant des revenus inférieurs à 2000 euros par mois évoquent en premier lieu la raison financière (30 %), alors que ceux avec des revenus de 2000 euros et plus mettent davantage en avant le manque d’intérêt (23 %)…» Mollie.
Las negritas son mías.
«Se venden saldos de cuerpos de seres humanos. Precios de ganga”.
Saldos excedentes de todo incluso de seres humanos. El homo económico vive en pequeños almacenes rodeado de todo o casi todo lo que ofrece el mercado sobre todo ropa zapatos electrodomésticos de todo tipo y sobre todo su pequeña Disneylandia que lo distrae las veinticuatro horas siete días a la semana. Tal situación le obliga a salir a la calle y la calle está vacía de tiendas de bares y los pocos que hay están regidos por gente de fuera del barrio que impiden establecer conversaciones de los temas de la gente del barrio igual ocurre con las tiendas que permanecen abiertas. Los saldos se siguen por las pantallas y los porteadores se encargan de traerlos a las casas con sus bicis motos furgonetas ….se acabaron los empujones y las peleas por poder quedarse con la mercancía deseada por dos o más y también se acaba la fiesta del consumo colectivo . Dentro de poco ofrecerán tantas posibilidades que terminarán por regalar mercancías y con ello el homo económico se convertirá en un saldo que nadie querra .No digamos ya aquello que se vende de saldo por las pantallas . Los futuros actores y demás que llenarán las pantallas serán fantasmas creados de manera artificial sin existencia real. Todo saldos gratis para distraernos películas libros musicas incluso diseños nuevos hechos para mantener nos encerrados en nuestros cubículos hasta las cárceles escuelas hospitales cuarteles militares se irán cerrando. Toda realidad desaparecerá incluso los sacos de pienso nos mantendrán en vida sin necesidad de salir a la calle. Al final el capital abstracto habrá triunfado sobre lo concreto vivo acabando con el mercado.
José,
Vaya panorama … «Virgencita, virgencita…»
Q.-