Le Monde, 13 / 14 septiembre 2024. Foto JPQ.
Durante medio siglo largo, el Abad Pierre, Henri Grouès (1912-2007), fue el personaje más popular y querido de los franceses. Con varias décadas de retraso se descubre con horror que el sacerdote y político fue un «agresor sexual compulsivo» en Francia, los EE.UU., Marruecos, Canadá.
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El 1 de febrero de 1954, el legendario abad lanzó a través de las ondas de RTL, primera cadena de radio nacional, privada, un histórico llamamiento pidiendo la solidaridad con los pobres y los sin techo, sin domicilio fijo (SDF), que morían de frío por las calles de París y otras grandes ciudades.
Aquel llamamiento tuvo un eco excepcional. El abad había sido resistente contra la ocupación nazi y político progresista, antes de descubrir la fe y consagrarse a una militancia muy activa contra la pobreza y las injusticias sociales.
Roland Barthes, gran crítico literario, llegó a escribir muy pronto que el abad se había convertido en un icono nacional con su «insurrección pacífica contra la pobreza». Durante treinta o cuarenta años, desde los años 70 del siglo pasado, fue el personaje más popular y querido de Francia. Tan popular como de Gaulle o Brigitte Bardot. La personalidad más querida de la nación, según centenares o miles de sondeos.
Su militancia muy activa se transformó pronto en una Fundación y un movimiento nacional, primero, internacional, más tarde, el Movimiento Emaús, bien implantado en numerosos países.
Con motivo del aniversario de los 70 años del primer llamamiento nacional, la glosa de la figura del abad, de su fundación y del Movimiento Emaús, los estudios sobre el personaje y su historia han comenzado a descubrir rostros muchos más negros e inquietantes.
A mediados del mes de julio pasado, Emaús publicó las conclusiones de un estudio que descubría «comportamientos que pueden emparentarse a agresiones sexuales y acoso sexual contra menores de edad, jóvenes y mujeres», entre 1970 y 2005.
Esa primera noticia causó un estupor inquieto.
Semanas más tarde, el semanario católico La Vie, publicó un rosario de informaciones y reportajes que agravaron el estupor: «El abad Pierre acusado de agresiones sexuales». «Las razones del silencio». «Nuevos testimonios publicados por Emaús». «Emaús y la Iglesia, bajo la presión del escándalo». «El abad Pierre, entre luces y sombras en el Festival de Aviñón».
La revelaciones de Emaús y La Vie precipitaron una intervención y estudio de la Commission indépendante sur les abus sexuels dans l’Église (CIASE, en la que participan representantes del episcopado), que comenzó por recoger más de 1200 testimonios de abusos y agresiones sexuales cometidos por religiosos.
Según el informe de la CIASE, queda confirmado y documentado que el abad Pierre cometió abusos y violaciones en Francia, los EE. UU., Marruecos, Suiza y Canadá.
«La compulsión sexual del abad, su inclinación, pasión vehemente y contumaz, desembocando en agresiones sexuales, parecen indudables», escribe la CIASE, que describe esa «compulsión» de manera muy precisa: «Lenguaje sexual muy crudo, besos impuestos por la fuerza, agresiones sexuales sobre personas vulnerables y menores, felaciones y relaciones impuestas que pueden considerarse violaciones».
Tratándose de un icono nacional, durante más de medio siglo, la personalidad más querida y popular de Francia, durante décadas, las revelaciones han tenido un impacto considerable. Una comisión independiente deberá continuar las investigaciones.
La Fundación Abad Pierre, Emaús Francia y Emaús Internacional, se han apresurado a anunciar el cambio de nombre. Es difícil guardar indefinidamente el nombre y la aureola legendaria de un personaje que también fue un «agresor sexual compulsivo». ABC, La transformación del abad Pierre: de ‘ángel de los pobres’ a agresor sexual compulsivo.
Pablo75 says
«Abbé» no es lo mismo que «abad». «Abbé» es «cura, padre». La buena traducción sería, pues, «el padre Pierre».
Sobre su fama, se te olvidó decir que se han escrito una decena de libros sobre él y se han hecho tres películas sobre su vida y obra…
JP Quiñonero says
Pablo,
NO.
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Abbé:
1. Supérieur d’un monastère d’hommes qui a le titre d’abbaye.
2. Titre donné à tout ecclésiastique. (Le titre de monsieur l’abbé est de plus en plus remplacé par celui de père.)
3. En Afrique, prêtre d’origine africaine (par opposition à père).
Traducción correcta:
1 [de conveto] abad.
2 [de inglesia] padre.
Curé:
1. Prêtre pourvu d’une cure.
2. Prêtre desservant.
3. Familier. Ecclésiastique, prêtre catholique (plus ou moins péjoratif) : Il a été élevé chez les curés.
Traducción correcta:
Cura:
1 Sacerdote católico.
2. En la Iglesia católica, sacerdote encargado, en virtud del oficio que tiene, del cuidado, instrucción y doctrina espiritual de una feligresía.
El Papa Francisco: «Le terrible pécheur, c’est [le pape], l’abbé Pierre, c’est un malade».
Q.-
Pablo75 says
No entiendo tu «NO», puesto que estás de acuerdo conmigo:
«Traducción correcta:
1 [de conveto] abad.
2 [de inglesia] padre.»
Dado que l’abbé Pierre no vivió en una abadía, hay que decir el «padre Pierre» (como se llama a su equivalente argentino «el padre Pedro» [Pedro Opeka].
JP Quiñonero says
Pablo,
NO.
Dices: La buena traducción sería, pues, “el padre Pierre”.
Pues no, como dicen los diccionarios que cito,
Q.-
Pablo75 says
Los diccionarios dicen que para llamar abad a un cura tiene que vivir en una abadía.
En el DRAE ninguna definición de «abad» corresponde a l’abbé Pierre.
En España a ningún cura de ciudad se le llama «abad». En Francia, «abbé» se utiliza tanto o más que «père» para hablar de un cura normal.
JP Quiñonero says
Pablo,
Oséase:
Abbé:
1. Supérieur d’un monastère d’hommes qui a le titre d’abbaye.
2. Titre donné à tout ecclésiastique. (Le titre de monsieur l’abbé est de plus en plus remplacé par celui de père.)
3. En Afrique, prêtre d’origine africaine (par opposition à père).
Traducción correcta:
1 [de conveto] abad.
2 [de inglesia] padre.
Curé:
1. Prêtre pourvu d’une cure.
2. Prêtre desservant.
3. Familier. Ecclésiastique, prêtre catholique (plus ou moins péjoratif) : Il a été élevé chez les curés.
Traducción correcta:
Cura:
1 Sacerdote católico.
2. En la Iglesia católica, sacerdote encargado, en virtud del oficio que tiene, del cuidado, instrucción y doctrina espiritual de una feligresía.
El Papa Francisco: “Le terrible pécheur, c’est [le pape], l’abbé Pierre, c’est un malade”
Pablo75 says
No entiendo lo que quieres decirme. Lo único que yo digo es que en el caso de que existiese une «affaire abbé Pierre» en España la prensa hablaría del «escándalo del padre Pedro». Ningún periodista español escribiría «el abad Pedro» (o peor, aún, como lo he visto en no sé que periódico español «el abate Pedro»).
JP Quiñonero says
Pablo,
OK.
Hasta aquí hemos llegado. Has repetido tu opinión varias veces.
No repetiré las definiciones.
Se acabó,
Q.-