Gare / Estación Montparnasse, 23 septiembre 2024. Foto JPQ.
Un ministro del Interior «ocultó» el nombre argelino de su familia paterna para poder hacer carrera. Su sucesor anuncia «más expulsiones y menos regularizaciones».
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Gérald Darmanin, ministro del Interior saliente, antiguo portavoz de Nicolas Sarkozy:
«Je m’appelle Gérald Moussa Jean Darmanin. Mon père avait souhaité me donner le nom de Moussa, en hommage à son grand-père, tirailleur algérien ayant servi la France. Il est assez évident que si je m’étais appelé Moussa Darmanin, je n’aurais pas été élu maire et député et sans doute je n’aurais pas été nommé ministre de l’Intérieur du premier coup».
Bruno Retailleau, nuevo ministro del Interior, Fidel de François Fillon, primer ministro de Nicolas Sarkozy: «Je vais commencer par réunir dans quelques jours les préfets pour leur demander d’expulser plus, de régulariser moins».
Francia se pregunta: «¿Puede durar el gobierno de cohabitación entre Michel Barnier, primer ministro, y Emmanuel Macron, presidente?». «No mucho», responden al unísono prensa y opinión pública… El Ejecutivo de Barnier en cuarentena antes de comenzar a gobernar.
Temo que esos problemas no se resuelvan con militares armados patrullando por las estaciones de ferrocarril.
Ministra de Cultura, hoy, hija de inmigrantes magrebíes, Rachida Dati… Hace diecisiete años, un presidente muy conservador, Nicolas Sarkozy, la nombró ministra de Estado y Justicia: Retrato improvisado de Rachida Dati, madre soltera.
Una mayoría de franceses apoyan el cierre de las fronteras nacionales contra la inmigración.
El Constitucional da un estacazo a Macron … el francés y el inmigrante.
Macron asume y justifica su giro a la derecha ante la inmigración.
Macron da un cerrojazo contra la inmigración y provoca una crisis de su gobierno y mayoría.
Retrato improvisado de Gérald Darmanin en tiempos del coronavirus y la gangrena islamista.
Volvemos a la época helenista cuando preguntaban de donde eran y contestaban soy ciudadano del mundo hoy podríamos añadir soy apátrida como casi siempre ha sido así sobre todo los últimos quinientos años. La circunvalación del planeta con barcos lo cambio todo. Los conocimientos marinos y tecnológicos de los barcos ayudaron a cambiarlo todo. La ciencia tecnológica mecanicista arrasó con todas las culturas religiones y diferentes visiones de ver la vida y el mundo. Las últimas guerras civiles mundiales dan paso a las guerras actuales de sálvese quien pueda o parezcamos todos y no hay más. Los más lúcidos de la segunda guerra mundial a
el único objetivo común para todos no eran las soluciones finales de siempre era atrasar todo lo que se pudiese el final de todo. No hay lugar para las variedades culturales que llenaban la tierra la única cultura común para todos es la ingeniería para continuar sobreviviendo y está llegando a ser común para todos y deja de ser monopolio de unos pocos que se creían la cúspide de una humanidad que se podía controlar para ser los nuevos dioses a los que se debía plestesia.. Se les acabó el cuento y no hay el final de comieron perdices y fueron felices.
José,
En Francia todavía no han llegado a la guerra civil local… a ver como evoluciona la cosa.
«Virgencita, virgencita…»
Q.-