X, 22 enero 2025.
La instalación de Donald Trump en la Casa Blanca y sus primeras declaraciones han tenido una «virtud» inmediata: han precipitado un encuentro de urgencia de Emmanuel Macron y Olaf Scholz, en el Elíseo, la tarde del miércoles, para coordinar una respuesta común relanzando proyectos estratégicos franco alemanes y europeos.
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El presidente francés y el canciller de Alemania se sirvieron del «pretexto» de celebrar el sexagésimo aniversario del Tratado del Elíseo, que fundó la relación franco-alemana, y el sexto aniversario del Tratado de Aix-la-Chapelle (Aquisgrán), que relanzó las ambiciones comunes para el futuro de la Unión Europea (UE), para afirmar sus posiciones de principio, de una actualidad candente: «Es necesario afirmar una Europa más fuente y soberana, dispuesta a defender sus intereses de manera independiente».
Por si cabía alguna «duda», Scholz «centró» de este modo el origen último del encuentro, en la sala de honor del Elíseo: «El presidente Trump, está claro, es el primer desafío que debemos afrontar».
Desafío que tiene muchos frentes problemáticos, personales, bilaterales, europeos, institucionales, que París, Berlín y la UE, deben afrontar colectivamente, por razones que Macron resumió de este modo: «Tras la entrada en funciones de la nueva Administración en los EE. UU., los europeos deben, más que nunca, consolidar una Europa unida, fuerte y soberana; una Europa respetuosa de los lazos trasatlánticos, pero afirmando y defendiendo sus intereses nacionales y europeos». «Francia y Alemania deben asumir su papel histórico», subrayó el presidente francés.
Días pasados, el presidente francés comentó que Trump estaba al frente de una «internacional reaccionaria». Acompañado del canciller de Alemania, Macron fue un poco más elíptico, para insistir en este punto central: «La única respuesta, en los tiempos que nos ha tocado vivir, es más unidad, más audacia y más independencia para defender los intereses europeos».
Más parco, pero igualmente firme, Olaf Scholz declaró: «Francia y Alemania forman una pareja muy sólida. Europa, por su parte, debe asumir como un desafío los proyectos de la nueva administración de Donald Trump. Los europeos seremos unos aliados sólidos y seguros de sí mismos».
Sophie Primas, portavoz oficial del gobierno francés, matizó las ambiciones personales de Macron y Scholz, poniéndolas en una perspectiva común, europea: «La pareja franco – alemana se está reconstruyendo, para dar a Europa, la Unión Europea, un nuevo aliento colectivo, trabajando en común con la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen».
Al día de hoy la relación entre Francia y Alemania, antiguo «eje» reconvertido en «amistad privilegiada», fue, ha sido y sigue siendo el único «motor» conocido de la UE. Ante el «desafío» que plantea la llegada al poder y las «ambiciones» conocidas y por conocer de Donald Trump, Macron y Scholz desean proponer al resto de los miembros de la Unión «acelerar» los proyectos y ambiciones comunes en estos terrenos básicos:
-Invertir en los sectores que permitan «reducir» la dependencia estratégica, alusión directa a las industrias de la defensa y el sector energético. Sébastien Lecornu, ministro francés de la Defensa, subraya la importancia capital del proyecto común: «La Comisión europea debe defender la autonomía estratégica de Europa, utilizando el dinero de nuestros contribuyentes para financiar los equipos militares que necesitamos».
-Reafirmar las condiciones de una «competencia leal», alusión directa al riesgo de «guerra comercial» anunciada con las alusiones de Trump en materia de aranceles. Terreno capital para todos los europeos, adversarios o «simpatizantes» del presidente norteamericano. Francia propone «mutualizar» la deuda común.
-Apoyo a las iniciativas colectivas en materia de defensa europea, alusión directa a las «amenazas» trampistas de «reducción» o «recorte» el puesto de los EE. UU. en la defensa europea, si los aliados europeos «no cumplen» las condiciones impuestas por Trump. Del escudo anti misiles al suministro de misiles a Ucrania, existen diferencias sustanciales entre los proyectos de defensa de Francia y Alemania… Macron y Scholz aspiran a «zanjar» esas diferencias para afrontar nuevos desafíos comunes.
Ni el presidente francés ni el canciller alemán se proponen una «confrontación directa» con la «internacional reaccionaria» denunciada por Macron días pasados. Bien al contrario: se proponen afirmar los grandes principios fundacionales de las relaciones trasatlánticas, insistiendo en la doble defensa de los intereses nacionales, franceses y alemanes, indisociables de los intereses de la zona euro, y, más allá, de toda la UE, víctima de las tensiones apenas larvadas entre partidarios expresos de Trump (Viktor Orban, Georgia Meloni, entre otros) y los partidarios de la defensa de los intereses europeos, nacionales, comerciales, económicos, militares.
En ese terreno, capital, Sébastien Lecornu, ministro francés de la Defensa hizo la tarde del miércoles una declaración significativa: «Los europeos no vamos a intercambiar nuestra seguridad militar a cambio de hamburguesas». Dicho de otro modo: los intereses de los agricultores europeos, franceses, italianos, españoles, exportadores de vino, aceite, lujo, cosméticos, productos agrícolas transformados, no pueden estar «atados» al chantaje de los aranceles de Trump y el puesto de los EE. UU. en la seguridad de Europa. ABC, Macron y Scholz defienden una Europa soberana capaz de defender sus intereses ante Donald Trump + PDF.
Dios protegeme de los amigos que de los enemigos me protejo yo. A los americanos es malo tenerlos de enemigos pero peor es tenerlos de amigos espeto la mujer del sha de Persia irán y esto continúa. Europa da palos de ciegos no sabe a qué atenerse si continúa en la OTAN americana o crea una especie de pacto Berlín París y empieza otra pequeña guerra fría económica entre los que han sido amigos desde la segunda guerra y en esta tercera que empezó nada más acabar la segunda con la finalidad de crear el gran hegemon imperialista mundial. Y en esta estamos se empezó arruinando a Rusia y preparando el camino para llegar a Moscú los anglos haciendo que se gasta sen lo que no tenían con la amenaza de la guerra de las galaxias y llegaron a Moscú pero duraron poco. Ahora lo intentan con los amigos a los dos lados del Atlántico para intentar por segunda vez llegar a Pekín y reconquistar Delhi las fantasías de la mente no tienen limites no ocurre así con la realidad más compleja en permanente guerra con la mente de una especie enferma en cuanto se habla de geopolítica. La crisis actual afecta a todos los factores implicados en la vida de la especie algunos llaman a esta época el Antropoceno . La paranoia global empezó en la primera guerra mundial y continúa no hay psiquiatras preparados para curar o aliviar tamaña enfermedad mental de la especie. Veremos si el miedo reúne a toda la familia humana para reescribir otros derechos humanos y que no sean solo papel mojado y se puedan llevar a la realidad para apartarse lo más posible del abismo y sino a rezar a los dioses adormecidos en el Olimpo y de todos los olimpos existentes.
José,
«Virgencita, virgencita…»
Q.-