Leo con interés y espero que con algún provecho el artículo de Jordi Canal Josep Pla y la historia, que publica el último número de Pasajes de pensamiento contemporáneo. Más allá de la reflexión general sobre la historia, de primera calidad, me interesa un capítulo todavía mal explorado de la historia de Cataluña…
… el gran proyecto de reconstrucción económica, cultural, ideológica y política que debía “preparar” el posfranquismo, y en el que, trabajaron, durante varias décadas, personajes como Jaume Vicens Vives, Josep Ferrater Mora, Manuel Ortínez y el mismo Pla.
En verdad, la Cataluña de los últimos treinta años es el fruto de aquel inmenso trabajo de zapa. No tengo totalmente claro que los nuevos catalanes conozcan bien esa historia. Yo mismo he escrito sobre el puesto de Pla en la construcción de la Cataluña. Pero siempre pensé que se trataba, en mi caso, de una visión “meramente cultural”. Lo que no es poco. Jordi Canal me descubre que, en verdad, esa ambición cultural se integraba en un proyecto de reconstrucción cuyo “jefe” (Pla a su hermano Pere, ¡en 1956!) hubiera debido ser Vicens Vives.
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Biografía NO autorizada de CJC. CJC y CJC, en Caína y la historia de las literaturas.
Inmenso trabajo de zapa… Juan Pedro, no sé si he entendido bien, porque el trabajo de zapa, según el DRAE, tiene un cierto matiz peyorativo. Es «el que se hace oculta y solapadamente para conseguir algún fin». Y solapada es «la persona que por costumbre oculta maliciosa y cautelosamente sus pensamientos». ¿Quieres decir que Pla & cía nos condujeron al presente statu quo?
Joaquín,
Te agradezco el matiz.
Pura y sencillamente, ME HE EXPRESADO MUY MAL.
Me explico. En la vigésimo primera edición del DRAE, zapa es la “excavación de galería subterránea o de zanja, al descubierto”. Hubo esa zapa, excavación de galería subterránea, nada peyorativa y muy distinta, en efecto, al “trabajo de zapa”, más solapado. En el caso de Pla y Vicens Vives ─por quienes tengo respeto y admiración inmensos─ ese trabajo también era educación, descubrimiento, siembra y construcción. Y comenzó por ser trabajo público, cívico, escrito y casi siempre publicado. Me gustaría citar junto a ellos al editor Josep Vergés.
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En mi caso, siento horror de la miseria política inmediata de todos los bandos. Por el contrario, coincido con Jordi Canal en que los nuevos catalanes no siempre aprecian en su justo término aquel trabajo cultural de fondo realizado durante varias décadas.
Gracias de nuevo por el matiz.
Saludos,
Q.-