Caldetes, 13 agosto 2008. Foto JPQ.
Estado financiero reformado entre el 2009 y el 2011.
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El modelo económico / productivo español entró en crisis hacia el 2004 / 2005, cuando las instituciones internacionales advirtieron que se avecinaba el tsunami de la burbuja inmobiliaria, donde se había hipotecado la economía de las familias, los municipios, las comunidades autónomas y el Estado, Un tsunami amenaza España.
El verano del 2008, Pedro Solbes seguía mintiendo sobre los orígenes de la crisis española y la crisis internacional que estaba estallando, Pedro Solbes miente.
Zapatero, Rubalcaba, Solbes, Salgado y Mafo aceleraron el gasto y el incremento de la deuda para “combatir” la crisis, acompañando el endeudamiento de nuevo cuño con un largo rosario de reformas del sistema financiero de España, su Estado financiero:
–Reestructuración del sistema financiero en España.
–Recapitalización de las entidades financieras en España.
–Fondo de reestructuración ordenada bancaria.
–Banco Financiero y de Ahorros.
–Bankia.
Ese es el modelo de Estado financiero español que está implosionando, víctima de las deudas, las hipotecas, los activos tóxicos, la irresponsabilidad empresarial, el maquillaje contable y la incompetencia de las autoridades.
El Estado, las comunidades autónomas, los municipios, las familias y una o dos generaciones de jóvenes y menos jóvenes han quedado hipotecados a esa catástrofe.
Con esa implosión cataclismática culmina el aventurerismo político de la década ZP, que tiene otros rostros, igualmente pavorosos:
- Zapatero, Rubalcaba, Chacón y la disolución del socialismo.
- Zapatero destruye los fundamentos del Estado providencia y los modelos socialdemócratas.
- El incremento de la pobreza durante los años Zapatero.
- Generación Zapatero, jóvenes sin trabajo y jubilados prematuros.
- La década del retroceso y la pobreza de España.
- ¿Cuándo comenzó el maquillaje de las cuentas del Estado y las comunidades autónomas..?
- España, el Estado y sus bancos: deudas asfixiantes.
Jesús says
¿En los ocho años anteriores no pasó nada?
Leyéndote como siempre con todo el interés agradecido, aun desde lejos.
JP Quiñonero says
Jesús,
Hombre… la historia no comienza ni acaba nunca. Más o menos.
Digamos que, a mi modo de ver, lo que está implosionando es el sistema / Estado financiero que surgió de las reformas descritas en los cuatro o cinco links que resumen la historia bastante bien, de la Reestructuración a Bankia. Muy groseramente, gigantescos activos tóxicos fueron contabilizados como activos bien reales (un piso que no valía nada en el mercado era contabilizado como un haber que valía no sé cuantos millones: de ahí la gigantesca suma de millones evaporados)… y el gobernador del Banco de España -la autoridad de tutela- era incapaz de discernir entre realidad y realidad maquillada. Para averiguar cuando y como empezó el maquillaje -entre el 2008 y el 2011- sería necesario nombrar una comisión de contables expertos en lectura de balances y cuentas corrientes,
Q.-
Juan Moreno González says
Hoy hay cascotes de esa implosión volando por los aires, con la deuda marcando topes sin parar y en niveles que hacen la deuda financiera dificilmente soportable.
Los primeros cascotes de la implosión han descalabrado a unos cinco millones de personas. Y no creo que haya nadie capaz de calibrar cuantos más vamos a ser descalabrados o muertos en los próximos meses.
Vivimos unos momentos axiales de nuestra historia donde confluyen unos gestores politicos de anteriores gobiernos de capacidad y honradez perfectamente descriptibles, con unos gestores políticos absolutamente sobrepasados por la velocidad y severidad de los acontecimientos. De su capacidad hay quien duda también, pero en esta tormenta no conozco a nadie que sepa cómo permanecer seco, así que casi se lo tomo menos en cuenta.
Menudo futuro tenemos los paganos y menudo futuro le dejamos a nuestros hijos. Eso me quita bastante el sueño.
Una cosa con la que no estoy de acuerdo (la he oído hace un rato en una cafetería) es eso de que los ciudadanos no tenemos culpa. Eso será en una dictadura. En una democracia, escogemos a los que nos gobiernan y esa parte de culpa tenemos. Si votamos fuegos artificiales y nos olvidamos del frigorífico, no podemos luego hacernos los inocentes cuando llega la factura y no nos queda para leche.
JP Quiñonero says
Juan,
La vida está una miqueta achuchada (sic), efectivamente,
Q.-