Ocaso en la A75, 29 diciembre 2008. Foto JPQ.
Escribí el texto que sigue el 22 de diciembre de 1995. Se publicó cuatro días más tarde.
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Lo retomo veintidós años después, por razones que no sé si saltan a la vista. Tanto da.
HEIDEGGER Y LOS REYES MAGOS
Se acaban de publicar tres textos inéditos de Heidegger de una importancia evidentemente excepcional, porque plantean el problema de la Técnica y la Libertad para el futuro de nuestra civilización.
Estos Feldweg-Gespräche (Volumen 77 de la Gesamtausgabe, en curso de publicación, Vittorio Klostermann, Frankfurt am Main) fueron escritos al filo del fin de la Segunda Guerra mundial, en 1.945, y tienen una importancia no solo académica. Por primera y única vez, Heidegger comenta “en caliente” la actualidad más dramática de nuestra historia contemporánea, el Desembarco, el fin de la guerra, la liberación de los campos de concentración, recurriendo a un modelo retórico igualmente inédito en su vasta obra, el diálogo socrático más puro.
La tercera de esas conservaciones, entre un Joven y un Viejo, transcurre en un campo de concentración, en Rusia, en 1.945… Por sí sola, esa escena ya forma parte de la historia de las ideas. El curioso lector no encontrará, allí, ni en ningún otro rincón de esos diálogos, anécdotas o referencias a la “actualidad” más inmediata. Heidegger instala el va y ven de sus diálogos en la tierra de nadie de la reflexión pura, adentrándose, sin embargo, por la tierra baldía de los campos de ruinas de la guerra, la desolación y el olvido.
Instalando en un campo de concentración, en la estepa rusa, el más atormentado y visionario de esos encuentros entre figuras de la imaginación, Heidegger nos da la única pista esencial: creemos que estamos asistiendo al nacimiento atormentado de un mundo nuevo, asistimos, horrorizados, al descubrimiento de las cenizas de los hornos crematorios, pero, en verdad ¿no estamos corriendo el riesgo de asistir, al mismo tiempo, a un vasto proceso de destrucción de la cultura, víctima del poder tentacular y fáustico de una técnica con vocación planetaria..?
Pregunta sin respuesta, para nosotros, que el mismo Heidegger y Jünger plantearon en numerosas ocasiones. Replanteada en un campo de concentración, entre dos víctimas que se niegan a callar, dos víctimas que no han renunciado a la palabra, nunca (muy al contrario de lo que ocurre con los héroes de Beckett, convertidos en insectos o libélulas que han comenzado a perder el habla y la razón), esa misma interrogante habla de una razón insumisa, una conciencia de la muerte que pudiera convertirse, como dudarlo, en esperanza de redención.
Todo está perdido. Sería vano y ocioso pensar en la huida. La realidad del campo de concentración ha tomado proporciones planetarias. La realidad de la desertización de las tierras vírgenes, la realidad de la deforestación, la realidad de la polución de los océanos y el tímido inicio de la colonización del cosmos dejan poco margen de duda para la evidencia: la Técnica impone su ley, inexorable, a los hombres, las bestias, la naturaleza, la Creación toda.
Sin embargo, la posibilidad misma de continuar hablando, abandonados y sin salvación, en un campo de concentración, parece sugerir Heidegger, habla de algo tan misterioso como el retorno de los Reyes Magos a través del desierto, guiados por una Estrella que está escondida en los confines de la morada última donde viven las palabras.
Rilke se interrogó, en muchas ocasiones, en Ronda, en Paris, en Muzot, por ese espacio inmaterial donde florecen las palabras, que está en nosotros, sin que nosotros sepamos donde, y habla por nosotros cuando nosotros hemos perdido la palabra.
Rilke acabó soñando la reinvención de la Creación, a través de la palabra de Orfeo, que es capaz de bajar al infierno para intentar rescatar a Eurídice. Filólogo eminente, Heidegger no desea envolver el enigma con el velo de un mito. Heidegger sueña con el reencuentro de la palabra con el pan y la tierra de los hombres; en su caso, a la orilla del Rhin, a la espera de algo sagrado que debiera volver para encontrar cobijo en Alemania y la lengua alemana, la patria recuperada de una nueva e imprevisible Grecia. Ese es el Heidegger que intenta devolver la esperanza a su pueblo, releyendo dos poemas célebres de Hölderlin. El Heidegger que abandona a sus héroes en un campo de concentración habla de una realidad histórica mucho más angustiosa y feroz: el hombre, perdido, en el desierto esquilmado por los hombres, contempla la oscuridad nocturna del cielo, esperando, en vano, la aparición de una estrella.
¿Debo decir que también yo creo en los Reyes y en la Estrella..?
La prueba…
Los Reyes Magos y nuestra libertad.
Campos Elíseos… “Sea progresista, pida caviar a los Reyes”.
Campos Elíseos… Disney y el Tío Sam velan por nuestra Navidad, Año nuevo y Reyes.
Campos Elíseos… esperando a los Reyes, en huelga.
Campos Elíseos… Año nuevo: Jesús, María, el Niño, los Reyes, sustituidos por dinosaurios.
Madrid, una mañana de invierno… Hombre solo esperando a los Reyes Magos, en la Plaza Mayor.
Papá Noel y Reyes Magos… empleos precarios.
Reyes Magos chinos, con juguetes ensangrentados.
Los Reyes Magos traen regalos de Ramón.
Navidad y Reyes Magos, amenazados por la correción política.
Los Reyes nos salvarán de la crisis.
“Esperando a los Reyes…” es una serie, que forma parte de otros cuentos de Navidad, del mismo autor, París. Cuento de invierno…
Los Reyes… estimado, inmensos y entrañables, acercan sus pasos días a día, pisan por los senderos polvorientos; no sé cuales cortejos llevan, me importa menos. ¿adalides de añafil de plata que anuncian la llegada de los Magos?, ¿renegridos soldados, horros de armamento, al margen de malas intenciones, trama no más para espantar bandidos que acechan en los montes?, ¿tropas y tropas de edecanes, guarda de los regalos que habrán de recibir los niños? Melchor, Gaspar y Baltasar esperan las tres copas de anís que han puesto encima de la mesa los padres de las casas buenas, que era el carbón únicamente para el chiquillo pobre; y los demás no le veían. Y así se hizo la historia. Queden los Magos como premio al menguado que ensueña, que, inocente y vencido, aguarda la esperanza del verbum dimissum, límite extremo en que el Campo de Concentración desaparece, la obra de la magia lo lancina, lo tunde y lo destroza, queda en final de sueño malo… ¡Ojalá, amigo!
Ricardo,
Se tiene fe o no se tiene fe.
En la palabra, en mi caso. La tengo.
Pasan los estados, los campos de concentración, quedan las palabras… que parecían ilusión: y lo son, en su sentido más alto, luces que iluminan la oscuridad del tiempo pasado, el presente y el futuro.
Amén,
Q.-
«Me queda la palabra»; ¡a mi, también, gracias! Lo que sucede en mi caso es que la voz se convierte en desmedido chafarrinón de pintalibros, vocero público de infalibles cuchillas de afeitar, espejo en que Valle se mira y refleja un Callejón del Gato al que nningún preclaro de mente acude a retozar; solo pisa la bribia y la gallofa, sopistas de Alcalá y de Salamanca, pudibundos misacantanos en busca subrepticia de la puta del suburbio, un Romero de Torres, senecto y galicoso, cobijando sus fríos al himo del picón. ¿Qué pare en ese magma la palabra, estimado escritor en cuyo verbo y su imagen siempre suelo encontrar aliento cotidiano? Ya vienen los Reyes, algo me dejarán en mis zapatos, seis días llevan en la horma, trampa de pobre para que quepa más. Mañana, si escampa, café en el Gato Verde alcalaíno.
Ricardo,
En mi caso, los Reyes me trajeron… la foto de Català Roca de un niño contemplando una librería como si se encontrase delante de una pastelería del Paseo de Gracia… me traen tus palabras, oteando tus infinitos mundos, que siempre están en este… me traen la ilusión de un nuevo día, a vivir como Dios me de a entender… Los budistas y Spinoza pensaban -lo he repetido en infinitas ocasiones- que Dios es el conjunto de las cosas creadas y por crear…
Amén,
Q.-
Mis palabras, estimado -te dije y repito- son ojeada fugaz a un espejo que devuelve una imagen grotesca y relamida, del todo ya difunta, Frankenstein de las letras que ha surgido, lo sacó un trujimán ilusionista, lo hizo dentro de un acto que no sirve para nada; nadie pagó por verlo, ni siquiera de gratis acudían; el escenario, oscuro y revejido, atril mellado, de maderas muertas, bululú que han creado los orates, en busca de limosna para vino. ¡Ya son los Reyes! ¿qué traerá el nuevo día? ¿habré de fabricarlo? ¿robaré tus imágenes? ¿han de llevarme a BCN y a París? Filtra la luz la lluvia; debajo de mi casa, cruza el jardín un perro, va solo, es blanco y pequeñito, ¿no tendrá dueño? Dice el ordenador que cese de mirar, que hoy no hay melancolía, que me aplique a cumplir el Quijote del necio.
¿Ricardo? ¿u..?
Cada cual lleva consigo los Reyes que es capaz de crear, descubrir…
«… queremos construir el mundo nuevo que llevamos en nuestros corazones..» dicen que dijo Durruti en el fragor de la guerra civil.
Avanti..!
Q.-
Sí, Ricardo, quedando como «u»; y ya la noche de Reyes ha pasado. Llueve, intensamente, son gotas frías, las arrastra el viento. Dicen que en Alcalá de Henares nieva mañana, y fuerte, aseguran que casi todo el día. Las tempranas cigüeñas se van a congelar, poco les guardan sus firmes nidos, no tienen techo. Puede ser muy bonito el paisaje de Alcalá cubierto de nieve, casi insólito, recuerdo del pasado; y ahora que me hablas de Durriti, me viene a la memoria que en Alcalá asesinaron a Nin, Andreu, poumista ilustrado y secretario que fue de Trotsky, otro célebre vencido a quien se llevó la muerte violenta.
Así recupero a Ricardo, y me olvido de u. Había aparecido de no sé dónde.
Ricardo,
Si, estos negocios de la informática, o lo que sea, siempre tienen cosas que escapan a mi entendimiento.
No recordaba lo de Nin, tan de recordar, siempre; que siempre está cubierto con un manto de voluntario olvido, por parte de los herederos de los asesinos.
A lo que veo… no solo ha nevado en Alcalá. También ha caído nieve por esas carreteras abandonadas a su incierta suerte, recordándonos cosas tan elementales como la triste suerte de los viajeros errantes en la más impenetrable incertidumbre.
Que vaya un recuerdo para ellos, invitándote a no correr riesgos temerarios, tal como está el patio, oye.
Avanti..!
Q.-
olvidamos la meteorología, sí, creyendo que ya el planeta se encuentra bajo nuestro control; de repente, la nieve, no solo cubre montañas y laderas, tapa caminos, disfraza calles, atrapa vehículos…¿Imaginas una noche inmovilizado sobre una carretera secundaria o general, con el frío atormentando los cuerpos, la incertidumbre ante el socorro imprevisible, la distancia a la primera población, conductores enfermos, enfermizos o senectos? Iban mejor aquellos caminantes goyescos de «La nevada», pegados a sus burros y a sus mulas, cubriendo los tabardos y las mantas la nevisca, sabiendo que era así, y que la venta o la casona quedaba a una o dos horas de camino, y allí, la gloria o el picón, la sopa y los pichones, las bestias templando con su aliento la sala. Eran momentos inclementes, pero no había en ello drama; ahora, sí; no te lo palian el móvil ni los coches.
Ricardo,
Imagino, en efecto: el Infierno… el rostro más palmario de una modernidad amenazante. Esa dimensión sonámbula corre el riesgo de crecer, a la manera de esos monstruos goyescos que asaltan a los caminantes aterrados, si. Cómo dudar que la tecnología nos aporta cosas inmensas. También comporta riesgos de esa índole. Es lo que hay, qué quieres,
Q.-
Por primera vez, después de otras veces, llegan los Reyes Magos a la economía de los campos de concentración . Que gran invento de producir con mano de obra gratis ( hoy con el oxímoron «recursos Humanos»). Se han ido extendiendo por el planeta tierra de la misma manera que la técnica. Hay una pequeña diferencia de los campos de los que nos habla Heidegger y los actuales. Hoy los Reyes vienen cargados de comida y bagatelas a cambio de renunciar a vivir y solo trabajar e intentar sobrevivir pero sin soñar para eso tenemos las pastillas y pantallas que nos observan. Cuando todos viven lo mismo no hace falta literatura, pintura…En los pisos están las celdas en las que permanecen los humanos con sus juguetes tecnológicos para mayores y pequeños, neveras llenas de pienso y vacías de cogito. Las palabras están en las pantallas. La máquina repite lo mismo tantas veces como haga falta. La nueva oración es universal. De esta caverna nadie puede escaparse. Fuera no hay nada ni estrellas es el sarcófago de cemento del que no se puede salir. Nadie puede ser héroe ni santo. Las palabras están siendo sustituidas por imágenes visuales, auditivas….por sombras. En la oscuridad no hay ni fantasmas. La luz se esta apagando…o qué.
Jose,
Hummmm… Me quedo con esto: «… Las palabras están siendo sustituidas por imágenes visuales…» De eso trata el libro que estoy escribiendo.
Sin duda, nuestro patrimonio verbal está ahí, y quedará, cómo dudarlo. Es un universo semejante al Logos alejandrino: materia espiritual que todo lo relacionada, lo visible y lo invisible, si.
Al mismo tiempo, las imágenes, la fotografía, el cine… están creando una ¿variante? del mismo o distinto Logos… una realidad visual que no sustituye a las palabras, pero crea mundos propios.
No creo que esa luz se esté apagando. Esa luz nos ilumina…
Por el contrario, es cierto que las «luces» que nos amenazan (publicidad, medios de incomunicación audiovisuales, etcétera) son más amenazantes que nunca.
Avanti..!
Q.-
El tema de las imágenes es el del conocimiento y el saber. Platón creador del mundo de las ideas, tal vez el primer trascendente epistemológico dentro de un sistema conceptual. Distinguía cuatro tipo de imágenes a) la sirena, el centauro…;b) J.P.Q., J.R.R….;c) el teorema de Pitágoras, la ley de la gravedad….;d) Bien, Belleza, Verdad….Pero cuando se reduce todo a lo visual y auditivo…el Mundo Sensible no puede explicar el invisible Mundo Inteligible fundamental para entender el mundo de los Homínidos. Esperemos que no nos tengamos que parar en el mundo de la fantasia (a) pidamos a los reyes magos que nos dejen llegar al (b, c, d). Por favor politicos no nos encierren en la caverna o nos maten como hacían antes. Nadie nos puede negar la Realidad.
Jose,
Todo viene del Fedro, claro.
… a mi modo de ver, el cine, algunas películas, permiten algo así como imaginar y dar visibilidad a algunas cosas que antes solo podíamos pensar, temiendo que fuesen «irreales»… Algunos directores han llegado a filmar… la resurrección de los muertos, dando la palabra a unos difuntos francamente vivos, a la hora de la charleta…
… esas y otras libertades nos permiten crear nuevos mundos, parcialmente imaginarios: creados, contribuyen a descubrirnos maravillosos territorios que llegan a ser más duraderos y perdurables que todo el mundo real de la política y la economía, desmoronándose a ante nuestros ojos, aterrados en la catástrofe diaria de cada día.
… la creación de nuevos mundo quizá sea la realidad más alta…
… Amén.
Avanti..!
Q.-
Tienes razon. Estamos creando un mundo de imagenes. Algunas de gran valor e interes. Pero con el lenguaje cada uno creaba sus propias imagenes que pasaban a ser universales por las palabras quien las leia las volvia a particulizar. Cuantas interpretaciones habra de «la rosa de las rosas» de Rilke
Este mundo esta uniformizando mentes y sensibilidades todo para que señores y siervos no desaparezcan. Pero el macho alfa se esta volviendo impotente y la Dexeus cada dia tiene mas trabajo. Cucos que somos muy cucos. Visual-ORAL-ESCRITO-Visual. Dinero-mercancia-dinero.
Jose,
Algo así, en efecto.
En esa línea… la poesía, y la poesía en prosa, en particular, tienen para mi una importancia muy grande. Contra la polución verbal de cada día, unas palabras, líneas, bien escritas, tienen algo de vitamina espiritual, ayudan a respirar mejor, sin duda. Al menos, ese es el efecto físico que tienen en mi. Tras ese chute, la calle siempre me aporta cosas, intentando escapar, cuando se puede, a todos los líos endemoniados de cada día. Goya dice en algún lugar que la fantasía, a palo seco, produce monstruos. Aliada a la razón es la madre de todas las artes… Amen,
Q.-
L existir no té remei
i genera l`estulticia,
que es propaga a l’infinit…
Bauça. En el feu de l’ermitatge. (2014.Empuries)
Cuando hablamos de razón muy bien tampoco sabemos de que razón hablamos. En el XVII era en unos la razón físico-matemática y en otros la esclava de las pasiones. En otros eran las grandes síntesis de todo el conocimiento pero que no lo ampliaba (mundo, alma, dios) . En el XVIII-XIX todo lo real era racional y todo lo racional era real. Los monstruos empezaban a poblar la vida :Progreso, Revolución , Voluntad de Poder…
El XX-XXI disfrutamos de los frutos de la Razón .
Guerras Mundiales, Artefactos inteligentes, Sociedades Complejas …Hombre máquina como hombre sin atributos completamente obsoleto y absurdo. La imaginación (la loca de la casa) con la razón acaba con la Historia, con el Arte, con la Política, con la Religion … sobre todo con las mayúsculas y esto continua. Unos intentan interiorizar este final y otros retrasar todo lo posible esta post apocalipsis mundial. Ahora el único opio del pueblo puede que sea el arte del pasado cuando intentábamos construir la arquitectura de lo que es o debería ser un hombre.
Jose,
Amen a casi todo, si.
La razón, la fantasía, los monstruos, si, están ahí, a la vuelta de la esquina, con solo poner los pies en la calle.
Con respecto al opio del pueblo discrepo una miqueta… temo que no haya uno si no muuuuuchos opios del pueblo.
… opiniones basura,
… kultureta basura,
… periódicos basura,
… negocios basura,
… política basura…
… y todo eso difundido a toda hora por los medios de com. e incomunicación de masas… ¡cómo para salir vivos de la quema en curso…! Si recuerdas, en Catalunya County, las ventas de tranquilizantes se dispararon durante los meses de octubre y noviembre…
Oséase, que a cuidarse, con dieta mediterránea, cava y vino de la tierra,
Q.-
Paseando por el parque Miguel Servet de Huesca se me ocurrio una idea de politica ficcion pensando en Lastanosa noble y amigo de Gracian. Igual el origen del capitalismo esta en la inexistente España de las ordenes defensoras del Vaticano de los Borgias y el lujo y el poco amor al trabajo manual. Los protestantes y los chinos inventaron el trabajo como lo mas importante de la vida unos para llegar a dios y otros para honrar a sus antepasados. Hasta para aquellos que no podian vivir de rentas les propusimos que se hicieran picaros de curas, nobles, soldados, politicos, ricos…Un capitalismo que Max Weber no capto y continua vigente.
Jose,
Pues vaya usted a saber… dale vueltas al asunto.
Quizá no haya «un» modelo; si no varios… Gracián, si te acuerdas, sintió horror por Madrid y la corte, y fue partidario de algo así como una Tercera vía, en Cataluña… el modelo pícaro andaluz / castellano chocaba para él con los modelos de la Corona de Aragón / Cataluña y todos esos líos. El modelo económico de la Picaresca quizá pudiera tener algo que ver con el modelo de la corrupción muy de ahora mismo, que en eso quizá se parecen en algo los modelos andaluz y catalán, dicho sea sin ánimo ofensivo para nadie… Andalucía, Cataluña, España: “La corrupción es vida”,
Q.-
Parece que hablar de izquierda y derecha no esta de moda. Sera que cada vez hay menos desfiles de soldados y mas de misiles. Todos en el mismo barco llamese Dios o Banco Mundial. Hasta la oracion que rezabamos de pequeños que decia «perdona nuestras deudas» ahora dice perdona nuestras ofensas. Izquierda o derecha si todos estamos en el centro. Velchite o Dresde que más da. Dios tiene poder y nosotros lo hemos heredado.
Amen y buenos días a todos D o I o C.
Jose,
Bueno… sobre ese lío izquierda / derecha, un profe de ciencias políticas me decía… “A partir de principios de los años 80, la crisis económica comenzó a engendrar una demanda de eficacia y competencia. Menos ideología y más eficacia. A partir de ahí las respuestas meramente ideológicas comenzaron a perder credibilidad. Los militantes no podían competir con los expertos, iniciándose entonces una demanda creciente de renovación”…
Vaya usted a saber,
Q.-
Siguiendo la estrella se los Reyes Magos, me encontré con el valiosísimo regalo de vuestras «PALABRAS».
¿ Cómo no creer en ellos?
GRACIAS A LOS TRES MAGOS!!!
Fina,
Efectivamente, todo comienza así … la ilusión del «érase una vez …» las palabras, las palabras, vistiéndolo todo con su hermosura, claro,
Q.-