Llueve. París un día de lluvia. Cesar Vallejo. El Perseguidor de JC, “In Memoriam, ChP”.
Los colegas de Le Monde me recuerdan el próximo aniversario de Charlie Parker. Stefano di Battista, saxofonista italiano, estima que Charlie Parker With Strings es el álbum definitivo de Bird. Nada me cuesta compartir esa opinión: hace años que escucho varias veces por semana esa compilación de obras maestras.
En el coche, bajo la lluvia, sintonizo con TSF, hacia el alba, y escucho a Wynton Marsalis afirmar que Lady in Satin, de Billie Holiday, y The Great Summit, del dúo Armstrong – Ellington, son dos piezas capitales de la historia del jazz. Lady in Satin debe ser el disco – cd – álbum que más veces he escuchado en mi vida, desde aquel lejano verano en casa de Milton Williams, en Hollywood, LA, acompañando a JJ y MAJ.
¿En qué otro o el mismo lugar de mi conciencia anida el deseo de volver a escuchar, siempre, algunas cosas de John Coltrane, tan próximo y tan lejano de la serenidad olímpica de Pau Casals interpretando a Bach, a este lado de los Pirineos, tan cerca de la tumba de don Antonio Machado, hasta donde llevé un día a mis hijos, JF y PJ, para intentar hablarles sin palabras de algunas cosas de la historia de su familia, el atardecer que Carmen, al volante, camino de la frontera, rompió a llorar recordando el invierno del Éxodo, por aquellas tierras?