El Times afirma que Zapatero no es capaz de competir con ETA, “inclinándose a favor del criminal”. «Improvisación política» [ .. ] «Titubeante y miope«.
“Durante los últimos cuatro meses, escribe el Times [3 marzo 2007, Zapatero has proved no match for a ruthless foe], el gobierno español ha tratado de equilibrar los riesgos de hacer un mártir de un asesino, siguiendo el más básico de los requisitos de justicia: que los asesinos cumplan sus condenas. Ayer, la balanza se inclinó a favor del criminal”.
Times, 3 marzo 2007:
Strike Out. Zapatero has proved no match for a ruthless foe
For the past four months the Spanish Government has attempted to balance the risk of creating a martyr out of a murderer against the most basic requirement of justice — that murderers serve out their prison terms. Yesterday that balanced tipped in favour of the criminal.
Iñaki de Juana Chaos, the convicted Eta terrorist, was released from a Madrid prison at least a year before the end of his sentence and 114 days into a bitterly divisive hunger strike. He has not won the unconditional freedom that he demanded; he will be under house arrest until his sentence technically expires. He thus retains a pretext to continue his hunger strike and indulge what has been called his “martyr complex” if he wishes. Meanwhile, his protest has already given Eta a new and unifying banner just when optimists in Spain were starting to hope that the organisation had tired of violence, and the Government of José Luis RodrÍguez Zapatero seems vacillatory and myopic.
The Spanish judicial system has, in fact, been unduly tolerant of de Juana and his lethal nar-cissism from the start. Convicted in 1987 of the murders of 25 people, he was sentenced to 3,000 years. But the small print to the sentence assured him of his liberty after just 18 years on condition of good behaviour. His approaching release presented Mr Zapatero, in 2004, with the first major test of his moral and political resolve.
There were no easy options, but to have released him in accordance with the law and rearrested him for the slightest transgression thereafter would at least have been clear and consistent. Instead, de Juana was resentenced on flimsy charges relating to supposed “terrorist threats” in two interviews given to Basque newspapers from jail. An extended sentence was the very least that much of Spain believed was merited. But it had the appearance of a political improvisation, and gave de Juana an undeserved claim to victimhood that has found echoes in pro-Eta demonstrations in Bilbao and elsewhere.
They have not gone unanswered. About 200,000 Spaniards took to the streets of Madrid last weekend to demand his continued incarceration — 75,000 more did the same last weekend. The hunger strike would not have polarised Spain as it has but for the bombing of Madrid’s main air-port in December. The blast killed two people and shattered an emerging consensus that in return for a year-long Eta ceasefire the search for a negotiated settlement could start. The best that can be said of yesterday’s release is that it creates an opportunity to begin rebuilding that consensus.
It is devoutly to be hoped that de Juana was sincere when he told The Times from prison last month that he was “completely in agreement with the democratic process of dialogue and negotiation”. But his record does not inspire confidence. This is the man who confessed to a machinegun attack on a police convoy in 1986 not while in police custody but in the Spanish High Court, for maximum publicity — and with no remorse. He has shown none since. Of two other Eta victims he once said: “Their tears are our smiles.” The lesson for Irish republicans from the deaths of ten hunger strikers in the early 1980s was that a military struggle with Westminster was unwinnable. That clarity came at great cost to both sides, but, as Spain is learning, clarity does not come cheap.
Luis Rivera says
Hay que reconocer, Quiñonero, que hoy lo más fácil es escribir un editorial. La política española, al igual que la inglesa e irlandesa durante el «proceso de retorno a la normalidad» se llenó de víctimas que trataron de indicar el camino a seguir. Probablemente por nuestra manera de ser en el ámbito social, que mezclamos con el político, estamos dando o están tomando, las víctimas, una posición directora que no les compete. Son el escudo del partido de la oposición, las usa como coartada moral.
Decir que las víctimas deben mantenerse en el ámbito social y desde allí su manifestación no será nunca política porque no será manipulada, ¿es acaso una canallada?
¿No sentirá alguien, en alguna ocasión, el probablemente desgraciado impulso de enviar a las víctimas a su lugar en la historia?^ Porque pase lo que pase, las víctimas van a ser dejadas en el camino en el momento en que en unas elecciones el partido de la oposición que se sirve de ellas, se encuentre en la tesitura de «hacer política» en lugar de fomentar «agitación social» (Uso la palabra agitación en términos sociológicos, que no se me malinterprete)
Analizar el futuro, hacer proyección, a la luz de la situación irlandesa, que es diferente pero no «radicalmente diferente» en lo que es el proceso de neutralización de la violencia, nos llevaría a ver el territorio de juego del futuro.
No me manifiesto sobre este tema casi nunca, salvo en este blog.
JP Quiñonero says
Luis,
Por todas esas mismas razones que tu desmenuzas con serenidad comencé a utilizar hace ya algunos años los términos Caina y medios de incomunicación social… no es fácil pedir calma y serenidad en una tierra donde el Odio crece y se vuelve a sembrar de manera tan frenética, cada día..
Q.-
paraules says
¿Puedo discrepar? Gracias:
A ver, las víctimas -cada una de ellas y en asociación- tienen todo el derecho del mundo a hacer política (y por eso son tan criticables como cualquiera). Y en este contexto, es lógico, palmario vamos, que prefieran a un partido que defiende una política de fortalecimiento del Estado frente a los nacionalismos y, por tanto, de dureza policial, etc. contra Eta. Máxime cuando la otra alternativa política se ha ido al garete y todo el mundo intuye que estamos en una travesía del desierto, un gobierno sin rumbo y aguantando derechazos (nunca mejor dicho), hasta las próximas elecciones.
Luego hay el griterío y las dos españas a garrotazos, que es tristísimo y, sobre todo, pesadísimo. Pero insisto, hay dos narraciones políticas bien trazadas y distintas, y una de ellas está fracasando (en Catalunya y en Euskadi); es lógico que los otros intenten sacar rédito.
Lola
JP Quiñonero says
Lola,
Dicha la verdad, hablas con una sensatez abrumadora. A título personal, no veo ninguna discrepancia de fondo. Si es verdad (por mi parte) que prefiero moverme en el terreno de los principios (¿?) sin pronunciarme jamás por este o aquel partido. Ahora que no nos oye nadie: los principales personajes de los principales partidos me inspiran una simpatía muy modesta. OK en discutir de HBroch, Brecht o Riba (Carles). Pero me siento incapaz de hablar de ZP, Rajoy, CR, etc. Me gustaría pensar que pertenezco a otro mundo, incluso zoológicamente. Vaya usted a saber,
Q.-
Jesús Cardona says
Creo que con De Juana, Zp ha querido probar qué pasaría si en un proceso negociador flexibilizara las penas. Ya lo ha visto. Zp tiene un estilo de gobernar muy peculiar con globos sondas y experimentos que no siempre son hechos con gaseosa. Me es muy difícil hablar sobre rebajas de cárcel. Por otro lado, no estoy seguro si 18 años entre rejas son suficientes o no para un criminal. Quiero decir, en mi familia no hay ninguna víctima y me desasosiega poder hablar con tanta frescura sobre la cuestión porque las víctimas son nuestra dgnidad. Hoy en Italia las Brigadas Rojas ya no existen gracias a los tiempos y a los buenos oficios de los democristianos, pero en la estación de Bolonia murieron 80 personas en un atentado.
JP Quiñonero says
Jesús,
Negras historias.
Me siento incapaz de dar consejos. Ni siquiera a ZP. Y mucho menos a ERC. Dicho esto, ya veremos por donde salen los distintos colectivos de presos. Etc..
Q.-