Àngel Duarte me pregunta con imperiosa cordialidad… “¿Qué pasa con Marsé? .. este año, la cosa va de una corrección política que tumba de espaldas!!!”
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¿Corrección política de Marsé, ganador del Cervantes, frente a Ana María Matute y José Manuel Caballero Bonald..?
Quizá. No lo sé.
Marsé me merece un respeto, oye. Un respeto grande. Afirmado el respeto, lo mío es muy pero que muy otra cosa: Juan Benet, Rodoreda, la Chacel, Porcel, etc. Y, entre quienes hubieran podido ganar ese premio, este año, mis preferencias van hacia la Matute (una Señora, oye) y Pepe Caballero Bonald, un Señor.
Mi cariño y respeto por la Matute viene de muy lejos: de la adolescencia y los primeros consejos maternos. Ese respeto es tan alto que hasta la convertí en “personaje” de uno de mis libros, Ana María Matute, amiga fiel de Celia Jiruña Carón. Y hace dos años ya lamentaba que no fuese ella la ganadora de ese mismo premio: Matute, Gamoneda, Marsé, Goytisolo, mi CJC y los premios, entre Caína y los Abel.
En cuanto a Pepe… su obra me acompaña desde hace muchos años: Brindis por Pepe Caballero Bonald.
Mi respeto por Marsé sigue intacto, tras el premio. Mi cariño y amor por las obras de la Matute y Pepe Caballero Bonald encuentra nuevas razones para brindar por ellos, con mucha simpatía y respeto.
¿Debo añadir que entre los premiados con el Cervantes hay muchas mediocridades y algunas ausencias que claman al cielo? ¿Añadiré que los dimes y diretes de la vida literaria me ponen los pelos de punta..?
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Cronología de los ganadores del Premio Cervantes.
Los galardonados en las sucesivas convocatorias han sido: Jorge Guillén (1976), Alejo Carpentier (1977), Dámaso Alonso (1978), Gerardo Diego y Jorge Luis Borges (1979), Juan Carlos Onetti (1980), Octavio Paz (1981), Luis Rosales (1982), Rafael Alberti (1983), Ernesto Sábato (1984) y Gonzalo Torrente Ballester (1985).
El premio también ha recaído en Antonio Buero Vallejo (1986), Carlos Fuentes (1987), María Zambrano (1988), Augusto Roa Bastos (1989), Adolfo Bioy Casares (1990), Francisco Ayala (1991), Dulce María Loynaz (1992), Miguel Delibes (1993) o Mario Vargas Llosa (1994).
Más recientemente, lo han obtenido Camilo José Cela (1995), José García Nieto (1996), Guillermo Cabrera Infante (1997), José Hierro (1998), Jorge Edwards (1999), Francisco Umbral (2000), Álvaro Mutis (2001), José Jiménez Lozano (2002), Gonzalo Rojas (2003), Rafael Sánchez Ferlosio (2004), Sergio Pitol (2005), Antonio Gamoneda (2006) y Juan Gelman (2007).
Debo ser más inculto de lo que pensaba, pues desconozco quiénes son: José Jiménez Lozano, Sergio Pitol y Juan Gelman.
Me parece que Sánchez Ferlosio fue el último gran nombre hasta el de este año, Marsé.
Nota: también desconocía en su día a Zambrano, Roa Bastos, Loynaz (la sigo desconociendo), Edwards y Mutis.
No te preocupes, Maty. Lo de ir descubriendo escritores es tarea de toda una vida, y de otras, si las hubiere.
Muchos van por ahí mostrando sus conocimientos sobre escritores a los que ni han leído ni leerán nunca, y los citan como si nada, e incluso se llegan a dar conferencias… Si tú supieras… Y es que muchos tinglados y «personalidades del mundo de la cultura» se hundirían si se llegaran a hacer públicos esos desconocimientos de por sí nada vergonzosos, todo lo contrario: la sinceridad en estas cosas es una muestra de inteligencia.
A Juan Gelman yo lo descubrí hace un par de años, y sí que te lo recomiendo, aunque la poesía no parece ser tu fuerte. Es un gran poeta, por mucha política y maquillaje que le quieran meter.
Pues por mi parte, te recomiendo a Jiménez Lozano. Precisamente hoy en mi blog he transcrito la parte de una entrevista que le realizaron hace unos años
Saludos
Maty, Ramón, Joaquín II,
… Maty,
Como verás, tenemos unos colegas muy puestos, que dicen cosas muy sensatas.
… Ramón,
SI… ¡es tan dificil confesar la ignorancia, cosa tan pura…!!!
… Joaquín II,
El maestro Pepe Jimenez Lozano todavía está por descubrir, en efecto, a pesar de los premios,
Q.-
Jiménez Lozano tiene un problema. O mejor, lo tienen los otros. Ha sido encasillado como escritor católico y eso, se quiera o no, marca. Caína, creo que es ¿no?
À.-
Jiménez Lozano es muy dificil de entender para mucha gente por aqui. Escritor «católico» (aunque siempre ha unido de tales sellos) Y autor de ese libro magnifico que es «Los cementerios civiles«. Muy crítico con muchas pòsturas de la jerarquía eclesiatica durante el franquismo Y con algunas reformas que se dieron en el Vaticano II.Demasiado para Caína.
Además escribe muy bien
Toda una provocación vaya…
Tomo buena nota de los maestros.
Soy de los pocos lectores de poesía que hay en España, me temo. Reconozco que no estoy a la última de lo que se cuece, sea poesía o no, pero no me importa, pues antes he de llenar grandes lagunas, así que prefiero centrarme en autores ya consagrados.
En la red hay que pensar muy mucho lo que se escribe, porque cualquiera puede sacarnos los colores. Por norma tengo no comentar sobre lo que no sé o no tengo una opinión conformada. Cuando la tengo, soy muy insistente/tozudo/pesado (Tarragona limita con Teruel).
Àngel, Joaquín II, Maty,
… Àngel,
Si. Lo de «escritor católico» tiene en nuestro tiempo algo de un estigma peligroso. Pepe lo lleva Muy Bien, con Gracia.
… Joaquín,
Hay mucha gente Obstusa, y Mucho Policía…
… Maty,
Venga…
Q.-
Don José (Jiménez Lozano, claro está) es uno de los grandes ninguneados en este país. El porqué debiéramos buscarlo en el cainismo y la estulticia nuestra. Sus diarios son, sencillamente, deliciosos.
Jiménez Lozano es un señor majete muy castellanoleonés, que escribe diarios y tiene algo de Josep Pla castellano. No lo he leído, pero quiero hacerlo, por muy recomenado, el siguiente relato suyo: El grano de maíz rojo.
De Pital leí El mago de Viena y luego intenté algún relato y se me atragantó. Vila-Matas se refiere a él como «maestro».
Y Marsé, pues creo que tiene su mérito, pero igual hace cuarenta años. Me recuerda a una tipología que leí por ahí de escritor bárbaro, como lo era también Tolstoi.
No creo que premiar a Marsé suponga mayor correción política que a Caballero Bonald. Bonald es un grandísimo prosista, un gran poeta y un excelente aficionado al cante gitano al que tanto debemos (y no sólo su citada «antología») los buenos aficionados. Pero Bonald, por mucho «Manual de infractores» que escriba no es ningún outsider, sino todo lo contrario: me da que en los últimos años está metido el cogollo de la cultura española de la órbita prisa, aunque seguramente sea fruto de las admiraciones que provoca en cierto nucleo de artistas y escritores de la capital.
Rafael, Eduardo, Joubert,
… Rafael,
Pueso eso.
… Eduardo,
Hombre… Tolstoi era bárabaro, pero de Muy Otras PROPORCIONES, dicho sea con cariño.
… Joubert,
Algo hay de eso, si. Pero,bueno. Tanto Caballero Bonald como Marsé, y no digamos la Matute, son gente de gran valía. La generosidad me parece algo esencial en estos terrenos: ¡son tan miserables las mafias filantrópicas…!!!
Q.-