En las grandes ciudades, el bar, la cafetería, en sus muy distintas modalidades, también son utilizados, con frecuencia, como rincón de estudio o lectura, improvisado gabinete de trabajo.
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Joventrabajando, rue St.-André-des-Arts, 24 febrero 09. Foto JPQ.
- Dark Lady.
- Fotografía en este Infierno.
Nina says
Sí… No quedan en mis ciudades muchos cafés así pero alguno sí…
JP Quiñonero says
Nina,
Mujer… hasta en los aeropuertos más estrambóticos (como el ChdG parisino) hay casi siempre un lugar limpio y acogedor,
Q.-
MMarie says
Delicado amor al estudio… ejem… MrQ.
el náuGrafo says
También echo de menos en mi ciudad, Madrid, más espacios en los que poder plantarte con tus bártulos más o menos eruditos. Y nada, la estudiante yo diría que es de oposiciones; hay algo de las bebedoras de ajendo en esa foto, así en plan siendo generoso…
; )
salud
Jordi says
Pues nada, todo el mundo a venirse a Berkeley, donde abundan los cafes llenitos de gente con sus portatiles y sus papeles, pasando las horas mientras saborean un Chai Latte, que es lo que se lleva aqui. Ah! Y para los anti-grandes corporaciones, ninguna es de Starbucks. Un paraiso, vamos!
Passy says
Estimado Juan Pedro:
A veces echo de menos que las fotos no sean ampliables.
Los ojos, claro, van hacia la amorosa inclinación del cuello de la joven. Justo al comienzo del gótico. De acuerdo: Algo que lee, provoca ese gesto. Esto ya es más moderno. No es una madonna. El objeto de contemplación es burgués: es la palabra escrita.
Bien ¿Y a la izquierda? Zoomm, por favor. Ese autoretrato inconsciente del fotógrafo, transferido a un tercero necesita, al menos para el investigador, un poco de claridad. ¿Adónde va la mirada de del hombre que Náugrafo remite -no sé si conscientemente- al conjunto de la imagen? Luz, taquígrafos y después, de vuelta a la penumbra.
Saludos,
JP Quiñonero says
Querido Miguel,
Uauuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuu… tu amistosa finura de análisis me emociona y deja traspuesto. Casi tanto como Coraline Clement. Nada que añadir: dejar constancia de mi gratitud.
En el terreno de la técnica / cocina, apenas un detalle… la foto original es Muy ampliable. La pequeña G10 crea imágenes que, según todos los técnicos, son ampliables a formatos bastante más allá del A4. Dicho esto… para archivar en Flick y manejar en el blog… se me antoja mucho más práctico hacer pequeñas copias en baja o muy baja densidad. Ahora que no nos oye nadie… mi único “blanco” era la joven, claro está; el buen señor es una aparición que se coló de rondón en el fugaz instante del disparo, sin que yo hubiese “contado” con él, para nada. Es cierto, sin embargo, que su imagen aporta algo…
Q.-
Mercè says
Sí, amigos, sí aporta, y mucho, el joven en penumbra. Y lo mismo el viejo en la calle reflejado en el cristal. Maravilloso ojo que todo lo ve, la cámara, dando sentido a lo que parece no tenerlo pero que convoca al fotógrafo, que no hace falta que sepa, ni que vea, sólo que sienta.
Ramón Machón says
Y yo que pensaba que la inclinación de la cabeza hacia el hombro tenía la finalidad mucho más prosaica de sostener el teléfono móvil, para de esta manera poder manejar las páginas. La walkyria está leyendo o diciéndole algo a un supuesto interlocutor lejano; de ahí viene su sonrisa, y no de un presunto placer en la lectura. Sobre la mesa ajedrezada ¿hay una calculadora? La walkyria estudia finanzas, matemáticas, estadística, astronomía, arquitectura? ¿No estará simplemente rellenando la declaración de la renta?
El sátiro pensativo es de verdad un elemento inquietante.
JP Quiñonero says
Ramón, Mercè,
… Ramón,
Hombre, «sátiro pensativo»… «inquietante»… tampoco es eso… digo yo…
… Mercè,
Hummmmmmmmmmm… vistas así las cosas, la instantánea fotográfica puede tener, en ocasiones, algo del trazo rápido y definitivo de los grandes acuarelistas chinos de la época clásica… que tampoco está tan alejados del trazo vertiginoso de algunos gutai japoneses, que casi son de ayer mismo,
Q.-
Mercè says
Eso me parece a mí, Q, exactamente eso… el tiro al arco, también.
Jose Luis González Ribera says
Hombre, Náugrafo, en Madrid hay muchos lugares donde se pueden llevar los bártulos de los que hablas. Varios lugares, al menos. Tampoco es cuestión de quejarse.
JP Quiñonero says
Mercè,
… tiro al arco, hummmmm, si, si…
Q.-