“En Buchenwald estaban los SS, pero no mandaban. Quienes mandaban eran los comunistas alemanes [ .. ] me beneficié / verifiqué la solidaridad y la fraternidad comunistas…”
[ .. ]
Quizá por vez primera (¿?), Jorge Semprún explica como se convirtió en kapo comunista en Buchenwald… “… allí estaban los SS, pero no mandaban. Quienes mandaban en el campo eran los comunistas alemanes [ .. ] era un privilegio enorme. En Buchenwald me beneficié / verifiqué la solidaridad y la fraternidad comunistas…”, Nouvel Observateur, 18/24 marzo 2010, Hans Magnus Enzensberger / Jorge Semprún. La frase exacta en jpg y pdf.
Stéphane Hessel ha explicado lo que siempre calla Semprún sobre el comportamiento de los comunistas en Buchenwald:
[ .. ] A partir de 1937, los comunistas asumieron la “gestión” del campo [Buchenwald] [ .. ] podíamos preguntarles qué podían hacer por nosotros, puesto que estábamos condenados. Nos respondieron que lo lamentaban, no podían hacer nada, reservaban su protección para sus militantes, como era el caso de Jorge Semprún, comunista español [ .. ] ¡Los comunistas eran formidablemente solidarios entre ellos..! [ .. ] [Citoyen sans frontiéres, Conversations de Stéphane Hessel avec Jean-Michel Helvig, París, 2008, pág. 77], Testimonio de Stéphane Hessel sobre el trabajo de Jorge Semprún en Buchenwald.
Robert Antelme, el primer marido de Marguerite Duras, viejo amigo y compañero de Semprún, fue el primero en denunciar e insistir en sus reservas morales sobre el comportamiento de Semprún y los comunistas en Buchenwald.
Gatopardo says
Otro enlace: «Mi último viaje a Buchenwald» por Jorge Semprún, en El País, 5 de abril de 2010.
Hablar contra todos los totalitarismos no exime de hablar de la particularísima responsabilidad personal.
Parece ser el recurso supremo de Semprún, que ha dedicado la mayor parte de su obra y de su vida a difuminar su culpa, atribuyéndose sólo los méritos del héroe y su papel de víctima.
Es una tentación común, perfectamente razonable, y, sin embargo, caer en ella es la máxima indignidad de un un ser humano, porque sólo podemos rescatarnos de nuestra iniquidad descartando las máscaras.
Pero corren malos tiempos para la autenticidad…
JP Quiñonero says
Gatopardo,
Si…
El artículo de hoy es el mismo, salvo retoque de última hora, del artículo publicado en Le Monde, Semprún sigue mintiendo sobre Buchenwald y los comunistas.
La novedad es la pequeña frase lapsus en el Nouvel Observateur: “En Buchenwald estaban los SS, pero no mandaban. Quienes mandaban eran los comunistas alemanes [ .. ] me beneficié / verifiqué la solidaridad y la fraternidad comunistas…”.
Hasta donde llega mi incultura, NADIE ha hablado del papel de los comunistas en Buchenwald, como GESTORES DE LA MANO DE OBRA… ese es el punto central que JS ilumina personalmente por vez primera (¿?)… me parece un punto nada pero que nada baladí… como recuerdan Antelme y Hessel, en los links que incluyo (un libro de memorias y una autocrítica dirigida al PCF) los kapos comunistas eran muy salidarios entre comunistas… pero utilizaban al resto de los reclusos como carne de cañón, que ellos entregaban para los trabajos a los que se iba para no volver… los comunistas se reservaban ellos mismos el papel mesiánico de responsables de la construcción de un futuro mejor… mientras tanto, eran los otros quienes debían ir al hoyo…
Q.-
PS. JS llevan más de medio siglo escribiendo libros sobre Buchenwald sin hablar jamás de ese extremo que, personalmente, me parece C A P I T A L…