Laura del Lago y una amiga, en El Hondo, verano de ¿2008? Foto Marc Turiel.
“Si nos ven, nos dará más gusto…”
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Para el narrador de la Recherche, el tema oriental de las aves pareadas (“les oiseaux accouplés..”) es una parábola sobre la resurrección, la muerte y la epifanía del amor, Albertine, el amor y las aves pareadas del gran arte andaluz y mozárabe.
El escándalo del amor, a la intemperie de la contemplación callejera, viene en nuestra civilización de El collar de la paloma, 6. Gloria y escándalo del amor, en la calle. El narrador de la Recherche, por su parte, lo retoma desde un ángulo muy turbador:
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Par une générosité instinctive et une politesse involontaire elle taisait les mots prémédités qu’elle avait jugés indispensables à la pleine réalisation de son désir. Et à tous moments au fond d’elle-même une vierge timide et suppliante implorait et faisait reculer un soudard fruste et vainqueur.
-Oui, c’est probable qu’on nous regarde à cette heure-ci, dans cette campagne fréquentée, dit ironiquement son amie. Et puis quoi ? ajouta-t-elle (en croyant devoir accompagner d’un clignement d’yeux malicieux et tendre ces mots qu’elle récita par bonté, comme un texte qu’elle savait être agréable à Mlle Vinteuil, d’un ton qu’elle s’efforçait de rendre cynique), quand même on nous verrait, ce n’en est que meilleur.
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–Mademoiselle me semble avoir des pensées bien lubriques, ce soir, finit-elle par dire, répétant sans doute une phrase qu’elle avait entendue autrefois dans la bouche de son amie.
Dans l’échancrure de son corsage de crêpe, Mlle Vinteuil sentit que son amie piquait un baiser, elle poussa un petit cri, s’échappa, et elles se poursuivirent en sautant, faisant voleter leurs larges manches comme des ailes et gloussant et piaillant comme des oiseaux amoureux. Puis Mlle Vinteuil finit par tomber sur le canapé, recouverte par le corps de son amie. [ .. ] MP, Recherche.. [ .. ] C’est peut-être d’une impression ressentie aussi auprès de Montjouvain.
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Las negritas son mías.
Tras una escena lésbica que culmina con una profanación, quizá no sea un azar que la amiga de Mlle Vinteuil esté convencida que su amor escandaloso asegurará a M. Vinteuil -el autor de la legendaria Sonata- “una gloria inmortal”.
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