Rue de l’Odéon, 30 enero 2023. Foto JPQ.
Ramón Gómez de la Serna vivió en el inmueble del fondo. Cioran era vecino de La Méditerranée, el restaurante de la derecha, frente al Odeón / Odéon.
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El logo / logotipo de La Méditerranée lo dibujó Jean Cocteau, por los mismos años que el restaurante estuvo frecuentado por Orson Welles, Chaplin, Balthus, que realizó una obra titulada Le Chat de la Méditerranée, cuya primera propietaria fue Laurence Bataille, hija de Sylvia y Georges Bataille, inmortalizada por el pintor.
Durante muchos años, guardé / estacioné mi coche en la cochera del edificio donde vivió Cioran, que quizá fue el último gran filósofo francés, muy alejado de las farándulas académicas, que consideraba como una suerte de ilustración última de la decadencia francesa:
» … Del individualismo y el culto de la libertad, por los que fue capaz de dar su sangre, Francia solo ha retenido, en su forma crepuscular, el dinero y el placer [ .. ] Cuando no se cree en nada, los sentidos se convierten en religión. Y el estómago en finalidad. El fenómeno de la decadencia es inseparable de la gastronomía…” → Cioran, Francia, España y el pueblo convertido en rebaño.
Una mayoría de franceses temen que Francia esté en decadencia.
Antonio Castillo Algarra says
Ay…
JP Quiñonero says
Antonio,
¡Viva Ramón..!
Q.-
Fina says
Quiño,
Viendo artículos anteriores que has publicado sobre Cioran, he encontrado verdaderos tesoros como este comentario de José Julio Perlado…
(…) Paseando por Praga con su amigo Janouch, Kafka decía: “La juventud es feliz porque posee la capacidad de ver la belleza. Es al perder esta capacidad cuando comienza el penoso envejecimiento, la decadencia, la infelicidad”. Janouch le preguntó:” ¿Entonces la vejez excluye toda posibilidad de felicidad?” Y Kafka respondió: “No. La felicidad excluye a la vejez. Quien conserva la capacidad de ver la belleza no envejece“.
Y tu respuesta:
…José Julio,
¡¡Qué cosa tan bella y tan honda esa frase de Kafka…!!! “Quien conserva la capacidad de ver la belleza no envejece“… La retomaré una y otra vez, recordándote, claro».
Quiño, lo que se aprende en este INFIERNO!!!
No había relacionado la decadencia con la gastronomía hasta leer a Cioran.
Muchas gracias por tus imágenes de París y por tus enriquecedoras historias…
JP Quiñonero says
Fina,
José Julio, ah. gran maestroooooo
Cioran, un genio, claro.
Tuve la suerte de intercambiar algunas cartas con Cioran. Y, efectivamente, su domicilio parisino es una dirección legendaria…
Estas anotaciones me sirven para dejar constancia de recuerdos, pasajes, rincones parisinos…
Palanteeeee
Q.-