Esquina Vaugirard / Guynemer, 16 enero 2017. Foto JPQ.
No es un secreto que aquella historia acabó mal. La historia de la chica más bella de Alabama y el escritor mejor pagado de los años 20 se hundió en el alcohol, la pobreza, la miseria, la desesperación, la locura.
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Mi ajada pasión por la Costa Azul data de mi primera lectura de Tender is the night. Huí de Madrid tras leer la traducción de Gabriel Ferrater de París era una fiesta. La esquina Vaugirard / Guynemer, donde vivieron Zelda y Scott-Fitzgerald está a dos pasos del vacío dejado por el Hôtel Foyot, donde Rilke anotó algunos pasajes de las Elegías ¿y don Manuel Machado tradujo a Verlaine? A dos pasos del restaurante donde Baroja y Ramón cenaban con Corpus Barga.
Hoy descubro que en esa residencia Zelda comenzó a hablar a las flores, las plantas, los árboles del Luxemburgo, donde yo enseñé a jugar al tenis a mis hijos.
Ana A. says
bellas historias..
maty says
L’hora del lector 06/02/2009: Alguns dels llibres esmentats i fins i tot comentats al programa del dia 5 de febrer
Aparecen unos cuantos libros de Scott Fitzgerald, incluido «Querido Scott, querida Zelda. Las cartas de amor entre Zelda y F. Scott Fitzgerald».
JP Quiñonero says
Maty,
Estás en todo… los Fitzgerald, qué personajes… a diario cruzo por esa esquina y los recuerdo, con nostalgia de mis primeras lecturas, si,
Q.-