Prado del Rey, ¿? 1975. Foto ¿Antonio Couto..?
En 1975, Alexandr Solzhenitsyn estuvo en Madrid.
Mis crónicas de aquella visita me costaron la enemistad de muchos amigos y contribuyeron a precipitar mi exilio.
Han pasado treinta años. Quienes me hicieron una guerra sorda y contribuyeron a cambiar mi ruta laboral descubren que el Gulag “está vivo”.
Hace treinta años, en Madrid, era intelectualmente peligroso denunciar el Gulag. Hoy, tras el hundimiento fáustico de la antigua URSS, resulta que está vivo aquel proyecto de construcción de un campo de concentración universal, apoyado en un parque de artillería nuclear.
Entre quienes contribuyeron a enviarme al destierro, el -por entonces- director de una revista de “pensamiento” maoísta, pagada por la embajada de Pekín en Madrid, ha dirigido si no sigue dirigiendo un periódico y -en particular- las páginas de opinión de un periódico de referencia. Su protector -que fue mi patrón- estaba protegido por su padre, periodista franquista cuando mi padre estaba en la cárcel.
Han pasado treinta años. Y tan viejos compañeros de viaje descubren que el Gulag “está vivo”. Los más eficaces medios de incomunicación de masas continúan sembrando semillas cainitas.
Wallenstein77 says
Buenos dias a todos:
Por las pistas que das, creo que se a quienes te refieres, uno ahora liberal de toda la vida pero que no admite la libertad de expresion cuando no se dice lo que quiera (un gran comunicador, con el segundo programa de la mañana creo que le dijo que no comiera tanto con la Iglesia) y el otro marido de una gran diseñadora (cuando digo gran diseñadora me refiero a que sus ropas las compran todas las españolas por su gran diseño y colorido). Las vueltas que da la vida.
Saludos a todos.
Juan Pedro Quiñonero says
NO van por ahí los tiros, querido Wallenstein. En absoluto.
Stalker says
Superbe Juan Pedro.
Dédicace dans mon dernier texte paru dans la Zone…
maty says
«Er Pai»
Ayer, el Gulag bolchevique, hoy los nacionalismos excluyentes.
Nota: me refiero a estas palabras: «Mis crónicas de aquella visita me costaron la enemistad de muchos amigos y contribuyeron a precipitar mi exilio».
Criticar al nacionalismo, sus excesos, sus simplismo, contradicciones,… desde Madrid es bien fácil, hacerlo desde Catalunya (no digamos desde Euskadi) tiene sus costes. Un dato: la mayoría de bitácoras informativas catalanas críticas con el nacionalismo están administradas desde el anonimato (sólo hay una que no, pero también intentó el anonimato tiempo atrás). ¿Os imagináis los motivos?
Por cierto, no me consta la existencia de bitácoras informativas escritas desde el País Vasco. ¿Curioso? Si alguien sabe de ellas, que avise (me da igual su decantación ideológica, sólo valoro la calidad de la ARGUMENTACION).
maty says
Bueno, dos, si contamos a Arcadi.
Wallenstein77 says
Hola a todos:
Pues cierto academico de la lengua que escribe novelas no dirige cierto periodico de referencia europeo desde hace años (salvo que lo haga por personas interpuestas). Maty soy de Bilbao (a nivel local de vivir en el extranjero diria que soy español)aunque no vivo alli arriba y si recurro al anonimato es para evitarme problemas por meterme con la junta, con el pp y con el psoe. Me imagino lo que sucede a quien escribe contra corriente alli arriba o en Cataluña, que como minimo, se te tacha de español igualandote a fascista, demostrandose el desconocimiento que tienen de Historia. Por desgracia, todos sabemos que en cualquier lado y mas si se identifica los ataques contra el «peublo, nacion o territorio x» se te tacha de ser un mal habitante de alli, etc., etc., etc.
Sobre bitacoras de informacion en Euskadi (Pais vasco, Vascongadas, Provincias Vascas, que cada uno las llame como quiera) creo que desde el Diario VAsco (de Vocento) se esta impulsando mucho el uso de bitacoras sobre todo politicas (en las anteriores elecciones parece que muchos candidatos de pequeño nivele scribian alli) y supongo que de informacion.
Saludos a todos.
Juan Pedro Quiñonero says
No sé si tiro piedras contra mi tejado… Por años que yo YA defendía a Solzhenitsin en Madrid, también defendía a Josep Carner, Carles Riba, Merçe Rodoreda, Baltasar Porcel y un largo etcétera.
En mi bibliografía hay un par de libros sobre donde ese tema está tratado de manera muy prolija. Y hace apenas un mes dí una conferencia en el Ateneu —-invitado por Jordi Coca—- donde volví a tratar la cosa… me temo que de manera poco o nada correcta. Helas. Nobody’s perfect. Yo tampoco. ¡¡Socorrooooooo!!!!!!!!
Perestroiko says
La revista que menciona Juan Pedro Quiñonero, supongo, es «El cárabo», en cuya mancheta de promotores nos podemos encontrar a Jon Juaristi y Joaquín Estefania. En el ejemplar que consulto (1976) nos informan de cómo los revolucionarios -«que representan el 90% de la población en China»- no permitirán nunca la implantación del capitalismo en el país.
De «Archipielago Gulag» sólo he leído la primera edición en castellano, no la reciente. La fenomenología del terror de Estado -y del autosometimiento-, implacable e insoslayable; el relato de cómo la socialización de la economía acaba amparando la batalla de los arribistas contra los capaces, verosimil. El encuadre histórico, inaceptable -llega a justificar el apoyo de los ucranianos al nazismo… ¡con tal de librarse de Stalin!-. Moshe Lewin (El siglo soviético, ed. Crítica) critica al autor de «Archipielago» por no haber tenido en cuenta todo lo que habia cambiado el sistema penal y judicial soviético desde los hechos que relataba Solzhenitsin -por dar a entender que las cosas no habian cambiado en 1973-; a la luz de lo que documenta Lewin, parece una crítica justa.
JP Quiñonero says
Perestroiko,
Sobre las revistas maoistas y españolas, en los años 70… casi preferiría dejar la fiesta en paz: la chismografía no es lo mío, sorry.
Sobre el Gulag… no sé si es fácil entender, hoy, la Importancia Excepcional que tuvo su publicación. Y el fanatismo que reinaba en Madrid y en París, al respecto. En mi despacho todavía tengo la fotografía de mi entrevista con Solzhenitsin, en Prado del Rey. ¡Como me pusieron mis compañeros de viaje por consagrarle dos páginas en el difunto <em>Informaciones</em>! ¡Cuantos amigos pasaron a considerarme un enemigo! ¡Como pesó todo aquello en que invitasen a marcharme al extranjero..! ¡Cuantas puertas se me cerraron y NO han vuelto a abrirse nunca…!
Q.-
PS. La evolución del personaje me pareció un horror. Condecorado por Putin, peor. Y las críticas técnicas a su libro… escapan a mi ignorancia.
Luis Rivera says
De los jóvenes, dijo el profeta Alí con una clarividencia que todabía hoy debería asombrarnos, cuando se le comentó un cierto gamberrismo o pasotismo en la juventud de la Meca, a poco de morir el profeta, que «más que parecerse a sus mayores se parecen al tiempo en que viven». Conviene no olvidar, si se quiere claro, esta aseveración.
Recuerdo la entrevista que le hizo Íñigo y el rechazo que produjo en un país izquierdizado. Yo mismo, sin ir más lejos. Recuerdo que frente a la oposición al régimen del novelista, se contraponía a Shojolv. ¿Porqué sentía yo ese rechazo? No lo sé: me parecía supongo a mi época de hoven y el profeta me hubiera dado una reprimenda de aquí te menees. Negábamos, en el fondo de nuestros corazones, que la URRS no fuera un buen experimento bien intencionado, cercado por el imperialismo USA. Como Cuba. Como medio mundo.
No sé, no lo he estudiado y dudo que se pueda estudiar, lo0 que representó la propaganda a fravor de la URRS en la República, cuando la única ayuda que se recibía era de ellos, y los únicos que practicaban la propaganda el Partido Comunista.
Había mucho romanticismo. A mi, cuando leí «24 horas de la vida de Ivan …» o cuando leí a algunos otros autores que sacaron sus manuscritos del paraíso comunista, me empezó a bailar la mirada y el pensamiento. ¿Cómo hipotecábamos la libertad? Esa pregunta, que abarcaría a toda la Europa occidental, debería obligarnos a una reflexión profunda, muy profunda.
Q…, no me gusta el padrecito ruso Solzhenitsin, personalmente no, pero ahora por otras razones. Sin embargo no le niego el valor. Y puestos a recordar, ahí tenemos a Sajarov. Con cuanto esfuerzo se abren los ojos, y lo que me asombra es que hay tanta gente que está convencido de tenerlos abiertos…
Y con todo esto hay que afirmar una cosa: el más profundo desprecio por todos aquellos izquierdistas de salón que a la izquierda del PC, jugaron a la albanesa. ¿Donde están sus líderes? Nos asombraría saber que alguno de ellos es consultor político, o que otro abominaba de la Generalitat y del gasto autonómico y hoy vive de un puesto semi oficial en la Generalitat.
Escribí hace algo más de un naño un blog nostálgico de aquellos tiempos y de los de hoy: http://enelbosque.blogspot.com/2006/o3/rosa-y-gonzalo-por.cuando.ramos.html
Luis Rivera says
La dirección correcta: http://enelbosque.blogspot.com/2006/03/rosa-y-gonzalo-por-cuando-ramos.html
JP Quiñonero says
Luis,
Bueno… la crítica de la URSS comenzó con el comienzo mismo de la instauración militar del régimen. Las Memorias de Volin (La revolución traicionada) cuentan con detalle y color el momento en que Trostki, al frente de unidades del Ejército Rojo, instala la batería de cañones que van a destruir los sindicatos anarcosindicalistas…
Desde ese instante, hasta finales de los años 60 del siglo pasado, se sucedieron muy numerosos debates. Valga un ejemplo: los enfrentamientos entre ACamus, Sartre y MMerlo-Ponty.
Sin embargo, los primeros documentos literarios de fondo publicados ya muy tardíamente fueron las novelas de Alexander Solzhenitsyn. La edición francesa del Gulag, la primera, si no recuerdo mal, precipitó una tormenta, que estalló públicamente en la difunta emisión de Bernard Pívot, Apostrophes. Glucksman publicó aquel año o un año después su libro sobre la experiencia concentracionaria, que ya había sido denunciada, sin éxito, desde muy primeros años cuarenta y cincuenta, por antiguos trostkistas (Castoriadis, etc.)
Solzhenitsyn fue invitado a Madrid, a raíz de aquel inmenso aldabonazo. Y aquel viaje fue un desastre intelectual absoluto. Por razones que se me escapan, un lector anónimo, “Perestroiko” (¿?) ha desenterrado viejas anotaciones al respecto, que vuelven a recordarme hasta que punto todo eso fue grave y continúa mal explorado y peor conocido.
La evolución personal de Solzhenitsyn ha sido tirando a lamentable. Y la “coronación” de Putin (antiguo chekista) tiene algo de pavoroso, cruel y atroz. Tuve una amiga que nació en Moscú y me contaba (en Moscú, en Tiflis, en San Petesburgo), por aquellos años, como se lloraba en su escuela el día de la muerte de Stalin. Su padre fue uno de los fundadores del PSUC.
Había creyentes francamente honrados. Pero los había ya muy curtidos en la colaboración nazi-comunista, por ejemplo, en Buchenwald, a raíz del Pacto germano soviético. En curioso que, en Madrid, en Barcelona, nadie desea leer ni comentar la historia que cuenta Robert Antelme (comunista honrado, si los hubo; primer marido de Marguerite Duras) sobre el comportamiento de Jorge Semprún en Buchenwald. No se trata de viejas historias: se trata de historias que es indispensable conocer, si se quiere hablar de cosas tan elementales como “ética”, “moral”, etc.
● Las reservas morales de Robert Antelme sobre Jorge Semprún y los comunistas, en Buchenwald.
● Confesión de Antelme al comité central del PCF, denunciando el comportamiento de Jorge Semprún.
PS. Luis… a todo esto, ¡que emocionantes son tus recuerdos de la época…!
Perestroiko says
Buenas
Si las alusiones a las revistas maoistas perturban, por un abuso de hospitalidad, la página, no tengo inconveniente en que se borren. Aunque no está de más recordar que cierto informador de la COPE no es el único que ha pasado de «dogmático de izquierdas» a otra cosa.
En cuanto a mis «viejas anotaciones»… cuando Solzhenitsin vino a Madrid yo vivía en un pueblo de la sierra de la Demanda y tenía tres años de edad; desde el mirador de ese lugar y de mi edad, puedo definir a España de muchas maneras, aunque no como «país izquierdizado»; las únicas viejas anotaciones que puedo exhumar en mi memoria -en lo que a invitados de Jose Maria Iñigo se refiere- son sobre Uri Geller.
Supongo que sobre el Gulag y la historia de la URSS puede escribir todo aquel que se documente y podemos leer todos y compartir lecturas. El libro de Moshe Lewin que cito es reciente, aunque Lewin es un viejo zorro de la «sovietología»; pienso que es muy iluminador sobre los aspectos humanos, demasiado humanos, del experimento soviético, y no sólo en lo que se refiere a los dirigentes.
Luis Rivera says
Es obvio, Q…. Evtuchenko tiene un hermoso poema sobre la multitud angustiada en la Plaza Roja, en la muierte de Stalin. ¿Porque no? La fe no es culpable, lo es el engaño. Cuando llegó a mis manos el libro de Evtuchenko, hace por lo menos treinta y cinco años, recuerdo aquel otro poema «¿Que tocan los poetas de jazz en Moscú cuando están solos?» Lógicamente la música de la madrecita Rusia. Todo este siglo XX tanm carghado de tragedia y de lírica. ¿Cómo no decir que este país estaba en una estética de izquierdas? ¿Recordais el impacto de Novecento, de Bertolucci, cuando se la estrenó? ¿Alguien recuerda el parlamento de Marlon Brando cuando sodomiza a la Schneider en «El último tango». Porque es un discurso revolucionario. Los tiempos han cambiado y nosotros con ellos, pero la memoria debe quedar. Los buenos y los malos están terriblemente mezclados. Yo siempre me he decantado por el bueno de Camus y por el malo Semprún.
JP Quiñonero says
Luis,
Vaya una copa de cava…
Q.-
PS. ¡A estas horassssss! Mejor un café solo, con agua mineral.
luis says
Pero sobre esta matemática alternativa nadie dice nada. Calculemos desde la revolución rusa:
40.000 muertos diarios por siseria X 365 días X 90 años… = … más de 1.300 millones de muertos…
y la cosa no se resuelve:
2% población humanidad: 50% PIB mundial.
50% población Humanidad: 1% PIB mundial,
3 ciudadanos, más dinero 1ue 600 millones.
80% población = 20% riqueza…
Auqello se ha acabado… esto no… sin embargo, siguen hablando de aquello y no de esto…
Laly says
Uno de los mejores escritores rusos de todos los tiempos ha fallecido el 03-08-2008, en Moscu, a los 90 años. Autor de Archipielago Gulag (Direcc.Gral de Trabajos Forzados para presos Politicos del Estado sovietico de Lenin) cumplio condena y fue expulsado de Rusia.
En 1975 vino a España a dar unas conferencias, recien muerto el Dictador Franco,( y estaban algunos fabricando la democracia socialista entre unos y otras para guardarse el bolsillo) y hete aquí que se le ocurrio decir que para dictaduras la de Stalin, padre de la patria socialista, mejor padrastro) y muchos admiradores de la tal patria, le pusieron a caldo.
«Uds. Padrian trabajar donde quisieran, viajar a cualquier lugar de su pasis sin pedir permiso para desplazarse….etc etc.
Bueno, Juan Benet que estara en el paraiso socialista y de las huris llamo «fascista» y la corte de los que hacia 60 años habian dicho «Viva Rusia y muera España» no digamos que lindezas. Parec ser que los asesinados por Stalin eran mas buenos que los asesinados por Hitler.
Gracias a Dios, no se puede perseguir a nadie cuando uno se ha muerto.
JP Quiñonero says
Lali,
Juan Benet fue mi maestro. Y tu transmites uno de tantos infundios sobre él. Dicho en el contexto en el que lo dices, se trata de una difamación de la peor especie.
Solzhenitsyn NO vino a España a dar ninguna conferencia, si no a ser entrevistado en un programa de televisión. Al margen de la barbarie comunista, lo que dices sobre Solzhenitsyn en España no se corresponde a la realidad de su visita. Con Solzhenitsyn, en Madrid.
Q.-
Robert says
No recordaba que tan recién murió Franco.
maty says
Nihil Obstat -> EL PAÍS Vuelva al Gulag, camarada Solzhenitsin Ramón Muñoz
Nota: casi cinco años han pasado desde esta anotación, y yo estaba ahí, como el dinosaurio.
JP Quiñonero says
Maty,
Al margen de tu genial personal…
LA IGNORANCIA Y LA MALA FE TAMBIÉN COINCIDEN, EN ESE TERRENO, MACHACANDO EN UN HIERRO FRÍO.
En fin.
Q.-
maty says
Fue el gobierno del PSOE de Zapatero, con el apoyo de otros grupos, quien se empeñó en remover el pasado (memoria histórica). Eso sí, muy selectivamente.
De aquellos barros estos lodos.
Que Carrillo y Semprún no sean encausados en España sigue indignándome.
Alfon says
La apología de la violencia en la II República: El decálogo del Joven Socialista.
Saludos,
Juan Moreno González says
He disfrutado de la lectura del artículo y de algunos de los comentarios.
Gracias por iluminar brevemente pasajes de la historia reciente.
JP Quiñonero says
Juan,
Se agradece, oye. Qué tiempos, aquellos, si…
Q.-