Le Jardin du Souvenir, 2 noviembre 2018.
Hoy, Día de todos los Santos… → Valery, Brassens, Baltasar, Rafael, Feliciano, José Alberto…
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Halloween, Día de Todos los Santos, Día de los Difuntos … y los peruanos de París.
En el Jardin du Souvenir del Cementerio del Père-Lachaise -donde fueron enterrados muchos españoles desterrados- las familias que lo desean pueden esparcir las cenizas de sus difuntos → El Jardín del Recuerdo, en el Père-Lachaise, la metamorfosis de los cementerios y nuestros muertos.
Piedad cívica, moral y espiritual, que me recuerda las metamorfosis de los cementerios, no solo en Francia, convertidos en parques temáticos, con frecuencia, incluso en lugares en otro tiempo tan piadosos como Cataluña:
Sinera y los cementerios convertidos en parques temáticos.
Martin Parr descubre el cementerio de Sinera.
Los españoles y sus muertos… de Larra a Franco pasando por Antonio Machado.
Antonio Machado, Collioure y la infame turba de los muertos condenados a destierro eterno.
Montparnasse, metamorfosis… el Día de todos los Santos, 2.
Montparnasse, metamorfosis… el Día de Todos los Santos.
Antonio Machado, Pedro Salinas, Cernuda, Santayana, Max Aub, nuestros muertos y Larra.
Santayana, víctima de todas las mafias españolas → Santayana, una mañana de abril.
Muertos españoles, profanados; muertos franceses…
Las tumbas profanadas de nuestros héroes anónimos.
Actualidad de la profanación de las almas y las tumbas.
Sinera, los muertos, las hamburgueserías, etc…
De las pirámides donde descansaba el faraón con sus acompañantes a los obituarios. Donde la muerte lo impregnaba todo a una más de las transacciones de los vivos para con sus muertos. La muerte se quiere invisible en la nueva ideología de la juventud permanente
Hay un día que en los nuevos tanatorios y los crematorios automatizados frente a las hogueras de Benares el muerto todo arreglado se despide de los vivos. Los cementerios se llenan y empieza a escasear el espacio para los vivos que aumentan pero más los muertos que se acumulan en los nichos en el suelo en panteones en mausoleos …cada vez más cerca de las nuevas Disneylandias. Del cementerio Tikhvin de San Petersburgo donde descansan artistas como Dostoyevski al cementerio de Sinera donde se encuentra enterrado el poeta Salvador Espriu. Pronto los cementerios serán cenizas como sus muertos y la muerte desaparecerá.
José,
Bueno …
En materia de cementerios, hay mucha diversidad.
El de Sinera lleva olvidado de los catalanes desde, desde… hace mucho …
Esta mañana estuve en el cementerio parisino del Père-Lachaise… que sigue siendo un Señor cementerio… he pedido plaza…
Q.-
¡Ay, Quiño!
¿Lo dices en serio esto de que has pedido plaza?, ¿tanto amor sientes por tu París?
En mi caso preferiría ser ceniza enamorada, libre, desaparecer…y sólo quedar en el recuerdo de los que me amaron…
Hoy estuve en el cementerio de Montjuich visitando la tumba de mis padres, repintando unas letras de la lápida que con el tiempo se van borrando…recordándolos con mucho cariño y agradecimiento…reflexionando sobre la vida y la muerte…
¿Será todo un sueño…?
¡Quién sabe! Es hermoso «Le Jardin du Souvenir».
Fina,
Bueno …
…
Sería muy largo de … pero, si, mi destino último quizá esté en el Père-Lachaise …
Q.-
Josep,
¡Qué cierto eso que dices!
«La muerte se quiere invisible en la nueva ideología de la juventud permanente».
Sinera, el Pere-Lachaise, Staglieno, Milano, Hampstead… un largo y prorrogado etcétera de tumbas y panteones en que la horizontal del polvo se repite; en tiempos, fosas y catafalcos en iglesias, los martirium a cuyo arrimo los fieles se apegaban, dicen que aquellos santos ofrecían la bula que evitaba el infierno y era seguro alivio del dolor que implica purgatorio; antes de eso, las cuevas y hondonadas en que se dejan los cadáveres; también el mar, reposo de los náufragos luego de una agonía indescriptible que ofrece mucho mérito de ser canonizado…; amplia elección de cuanto los creyentes llaman camposantos: cementerio burgués al que señalan las letras, las estatuas y el recuerdo escrito, pirámides que acogen a tiranos, hoyos en que se mezclan los hombres y las bestias, vasos que guardan las cenizas de quién sabe, todos ellos espacios de quienes apetecen o se creen que es ya su patria para siempre; en guardia por nosotros, sea en Madrid, Paris, Addis Abeba, Bombay, Sapporo, Dallas, Camberra o Potosí, en las ondas más calmas o agitadas, la greda o la raíz de las semillas; peregrinos que acuden el Día de los Santos, prenden las velas porque las ánimas benditas no se pierdan cuando llame El Comendador a la puerta de Don Juan el libertino y no estén Doña Inés a La Daena, hayan los evos transcurridos, todo lo nuestro sea nada, apunte a lo mejor una esperanza en esa mente que dicen que subsiste, lo hace ella sola, presumen unos sabios.
Ricardo,
Sí … ante esas cuestiones de fe y creencias, tan íntimas y profundas, siempre me resulta difícil entrar en detalles y análisis … a decir verdad, yo mismo me dejo llevar por la tradición, como muestra de homenaje y respeto…
Q.-
Don Ricardo Lanza,
Ante la nada, como Ud. dice:
«…apunte a lo mejor una esperanza en esa mente que dicen que subsiste…».