Op.
* Sería penoso tener que recordar el puesto de Sevilla en la historia de nuestra civilización.
* Sería infame tener que recordar el nombre de los artistas y escritores sevillanos que han escrito páginas indispensables para la historia del arte y la cultura.
Que tal patrimonio se degrade con dejadez tan “alegre”, en nombre del marketing publicitario “internacional” —-sencillamente absurdo, en este caso—-, caído de hinojos en la miseria de su nadería desalmada, quizá recuerde de modo patético la vaciedad grotesca que nos (des) gobierna.