Los incendios, muerte, violencia y disturbios que se han sucedido y continúan sucediéndose en los suburbios franceses, también están dejando al descubierto los estragos de la desinformación y la incomunicación de masas.
Estadísticamente, la presencia de jóvenes musulmanes, creyentes, practicantes o no, es y ha sido insignificante.
Estadísticamente, es destacable la presencia de jóvenes franceses nacidos en la Guadalupe, la Martinica, Isla Mauricio, Senegal u otras ex colonias africanas, de convicciones religiosas inexistentes o poco significativas.
Sobre los respetabilísimos medios internacionales que fueron los primeros en difundir la idea (muy peregrina) de una “revuelta islámica”:
a).- Han metido la pata.
b).- No parecen tener ni idea de lo que están diciendo.
c).- Desconocen profundamente la realidad de cuanto ha ocurrido. Vaya usted a saber que pudiera ocurrir, mañana.
[ .. ]
** SPIEGEL ONLINE: Does Islam have a role to play in the current rioting?
** “Rien ne sépare les enfants d’immigrés du reste de la société”
** “Je brûle, donc j’existe et ça me suffit”
Anonymous says
Hola, querido Juan Pedro.
Hace algún tiempo hablabas de Clandestino Menéndez (amigo mío, y ya nos dirás si finalmente tuyo también). Pues bien: detrás de Clandestino se esconde José Miguel García Martín, talentoso escritor de quien pudo leerse una entrevista en idosyvenidos.com (otro de los satélites de La Fiera Literaria), a propósito de la publicación de una novela suya, algo de Martin Pijó. Si buscas en el Ibsn (a estos funcionarios siempre se les pasa registrar los pseudónimos), podrás ver las tres obras de José Miguel, Cuernos… digo… Cuadernos Críticos incluidos:
http://www.mcu.es/cgi-bin/BRSCGI3701?CMD=VERLST&CONF=AEISPA.cnf&BASE=ISBN&DOCS=1-10&QUERY=((277473.WAUC.)%20NOT%20(ANULADO.WDIS.))
Un saludo, y espero haberte servido de ayuda.
Anonymous says
José Miguel va de pseudónimo en pseudónimo. Resulta que las novelitas las firma como Miguel Baquero. Aquí, do su curro, viene una entrevista con él:
http://www.literaturas.com/EntrevistaMiguelBaquerojunio2003.htm
La foto me recuerda a su mentor Manuel García Viñó de joven. La misma calva, los mismos ojillos perdidos tras unas lentes, la misma sonrisa que no acaba de definirse, la misma falta de cuello… ¿Serán padre e hijo?